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Catarata

Noticiero ALACSA – R :: Septiembre 2013

Editor General

Virgilio Centurion – Brasil

Editores

CATARATA – Arnaldo Espaillat – Rep. Dominicana
REFRACTIVA Y CÓRNEA – María José Cosentino – Argentina

Coeditores de Cirugía Refractiva y Córnea

Arturo Chayet (México)
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Mauro Campos (Brasil)
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Editor de Vídeo

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Editores

CATARATA – José Luis Rincón (Venezuela)
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Coeditores de Catarata

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Milton Yogi (Brasil)
Ramón Lorente (España)

Director Ejecutivo

William De La Peña – USA

 

Traducción cortesía de

Servicio Internet cortesía de

Indice

Editorial
Degeneración macular relacionada a la edad y catarata
Dra. María Cristina Gabela, Dr. Francisco J. Rodríguez – Colombia

Foro Catarata 1
Manejo de catarata con pupila pequeña
Coordinador: Dr. Fernando Aguilera-Zarate – México
Panelistas: Dr. Juan Guillermo Ortega J. – Colombia, Dr. Armando Crema – Brasil, Dr. Enrique Suárez – Venezuela, Dr. Carlos Nicoli – Argentina

Foro Catarata 2
Perdida de células endoteliales después de cirugía de catarata con faco
Coordinador: Luis Escaf – Colombia
Panelistas: Dr. Arnaldo Espaillat – Rep. Dominicana, Dr. Eduardo Viteri – Ecuador, Dr. Luis Lu – USA, Dr. Mauricio A. Pérez – USA, Dr. Mauro Campos – Brasil, Dr. Ramón Lorente Moore – España, Dr. Virgilio Centurion – Brasil

Catarata: Ciencia – Arte – Experiencia
JNoticiero ALACCSA-R pregunta, colaboración del Dr. Virgilio Centurion – Brasil: Paciente del sexo femenino con 50 años, presenta disminución de la AV para lejos en AO, peor en el OD. Utilizó pilocarpina (colirio) por +18a, actualmente utiliza latanoprosta (Xalatan® – Pfizer) 1 vez/día. Ha hecho 2 veces laser para glaucoma en AO. Refiere que tiene diagnóstico de catarata. No mejora la visión con corrección para lejos, tiene visión “razonable” sin corrección de cerca.
Dr. Frederico França Marques – Brasil
Dr. Luis Escaf – Colombia
Dr. Agustín Carron – Paraguay
Dr. Juan Guillermo Ortega J. – Colombia

SBAO – Sociedade Brasileira de Administração em Oftalmologia
Finanzas e inversiones: El cambio y su impacto en la vida personal y profesional del médico Rogério Nakata – Brasil

 

Calendario 2013
Calendario 2014

Avisos

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Editorial

Degeneración macular relacionada a la edad y catarata

Dra. María Cristina Gabela, Dr. Francisco J. Rodríguez – Colombia

Fundación Oftalmológica Nacional. Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud. Universidad del Rosario.
E-mail: crisgabela@gmail.com / fjrodriguez@fon.org.co

La Degeneración Macular Relacionada a la Edad (DMRE) y la Catarata son patologías frecuentes y que se asocian al envejecimiento. Según la OMS (organización mundial de la salud) la catarata es la primera causa de ceguera en el mundo y la degeneración macular relacionada a la edad ocupa el tercer lugar. Se considera que la incidencia de estas dos patologías seguirá en aumento por los cambios demográficos y la tendencia de la población a envejecer (1).
La DMRE se caracteriza por la pérdida de fotorreceptores, anormalidades del epitelio pigmentario retiniano y alteraciones en la membrana de Bruch, que se expresan como la presencia de drusas, cambios pigmentarios por acumulación de lipofuscina y productos de degradación. El mecanismo fisiopatológico de estos cambios degenerativos se asocian a la luz azul del espectro visible (400-500 nm) y las reacciones de foto-oxidación y estrés oxidativo. La lipofuscina es la principal responsable del daño inducido por la luz azul (2, 3).
Con respecto a la catarata, se han encontrado varios factores de riesgo que han demostrado tener asociación con su desarrollo y progresión. El primero de ellos es la edad; la exposición a radiación UV tiene relación también debido a que el cristalino absorbe la mayor cantidad de este tipo de radiación. En pacientes con exposición a luz UV el OR (riesgo relativo indirecto) es de 1.10 (95 % CI 1.02–1.20) (2).
La DMRE clasificada como temprana o tardía también tiene varios factores de riesgo que se han demostrado en múltiples estudios (4). Estos factores corresponden a la edad, el tabaquismo, historia familiar, factores genéticos y la cirugía de catarata (5, 6). El Beaver Dam Eye Study encontró una asociación estadísticamente significativa entre los pacientes con DME temprana y la progresión a DMRE tardía luego de cirugía de catarata OR 1.96 (IC 1.28-3-02), especialmente en aquellos con DMRE temprana severa (7). Otra asociación importante es con el tiempo de cirugía de catarata y progresión de la enfermedad. En el mismo estudio se encontró que el OR era más alto para DMRE tardía en pacientes con más de 5 años de cirugía de catarata (7).
Un análisis reciente sobre la relación de la DMRE y la cirugía de catarata, basado en el Beaver Dam Eye Study estima el NNH (número necesario para hacer daño) con un modelo de ajuste máximo en el que encuentran que es de 208 para personas menores de 65 años, 63 entre 65 y 75 años, y 25 en mayores de 75 años, lo que indica que a pesar de que el riesgo de DMRE con cirugía de catarata es bajo, éste sí se ve aumentado de forma importante conforme aumenta la edad, teniendo un riesgo atribuible de 50% para DMRE en pacientes a quienes se les practica cirugía de catarata (8).
Con el fin de proteger a la retina de la DMRE en pacientes operados de catarata se han desarrollado y se usan actualmente lentes cromóforos con filtro para luz azul. Sin embargo, ningún estudio ha sido capaz de demostrar el beneficio de usar este tipo de lentes para prevenir el desarrollo o la progresión de la DMRE. Desde 1980 con los primeros lentes intraoculares de PMMA se usó filtro para protección de radiación UV, posteriormente a estos lentes se les colocó un filtro amarillo con el fin de evitar que lleguen a la retina los rayos con longitudes de onda corta, correspondientes a la luz azul (9). Estos lentes han sido aprobados por la FDA por el potencial beneficio que tienen, sin embargo este no es fácilmente cuantificable (9). Existe la preocupación de la alteración del ciclo circadiano por la privación de llegada de la luz azul a la retina. Sin embargo, estudios han demostrado que esta alteración del ciclo circadiano es mínima. Hay reportes y estudios con otras opiniones en las que se considera que no existe beneficio del uso de lentes con filtro amarillo (10).
En un momento como el que la oftalmología está pasando ahora, en el que se realizan cirugías de catarata a edades más tempranas, es importante tener en cuenta estos temas para tomar la mejor decisión junto con el paciente y escoger el momento oportuno de la cirugía de catarata, con el objetivo de no incrementar el riesgo de desarrollo de DMRE en pacientes con factores predisponentes para ello.
Otro tema a tratar con el paciente es el uso de lentes intraoculares con o sin filtro para luz azul, teniendo en cuenta que la evidencia no es conclusiva. Para los lentes con filtro azul hay que considerar el cambio a la sensibilidad al contraste, así como posible afectación del ciclo circadiano y los posibles beneficios que pueda brindarle al paciente comparado con lentes que no tienen este filtro que según otros autores serían mejores por no alterar la sensibilidad al contraste.

Bibliografía

  1. Buch H, Vinding T, Nielsen NV. Prevalence and causes of visual impairment according to World Health Organization and United States criteria in an aged, urban Scandinavian population: the Copenhagen City Eye Study. Ophthalmology. 2001;108(12):2347-57.
  2. Yam JC, Kwok AK. Ultraviolet light and ocular diseases. Int Ophthalmol. 2013.
  3. Rhone M, Basu A. Phytochemicals and age-related eye diseases. Nutr Rev. 2008;66(8):465-72.
  4. Freeman EE, Munoz B, West SK, Tielsch JM, Schein OD. Is there an association between cataract surgery and age-related macular degeneration? Data from three population-based studies. Am J Ophthalmol. 2003;135(6):849-56.
  5. Chakravarthy U, Wong TY, Fletcher A, Piault E, Evans C, Zlateva G, et al. Clinical risk factors for age-related macular degeneration: a systematic review and meta-analysis. BMC Ophthalmol. 2010;10:31.
  6. Ho L, Boekhoorn SS, Liana, van Duijn CM, Uitterlinden AG, Hofman A, et al. Cataract surgery and the risk of aging macula disorder: the rotterdam study. Invest Ophthalmol Vis Sci. 2008;49(11):4795-800.
  7. Klein BE, Howard KP, Lee KE, Iyengar SK, Sivakumaran TA, Klein R. The relationship of cataract and cataract extraction to age-related macular degeneration: the Beaver Dam Eye Study. Ophthalmology. 2012;119(8):1628-33.
  8. Howard KP, Klein BE, Klein R. Examining Absolute Risk of AMD in Relation to Cataract Surgery. Ophthalmology. 2013;120(7):1509-10.e1.
  9. Davison JA, Patel AS, Cunha JP, Schwiegerling J, Muftuoglu O. Recent studies provide an updated clinical perspective on blue light-filtering IOLs. Graefes Arch Clin Exp Ophthalmol. 2011;249(7):957-68.
  10. Mainster MA, Turner PL. Blue-blocking IOLs decrease photoreception without providing significant photoprotection. Surv Ophthalmol. 2010;55(3):272-89.

 

 


Foro Catarata 1

Manejo de catarata con pupila pequeña
Coordinador: Dr. Fernando Aguilera-Zarate – México
Panelistas: Dr. Juan Guillermo Ortega J. – Colombia, Dr. Armando Crema – Brasil, Dr. Enrique Suárez – Venezuela, Dr. Carlos Nicoli – Argentina

El manejo de pupila pequeña durante cirugía de catarata es uno de los retos más frecuentes que se encuentra en la práctica diaria. El manejo adecuado de medicamentos y maniobras puede asistirnos al desarrollo óptimo de nuestra cirugía y obtener los resultados similares a los obtenidos en casos de midriasis adecuada.

Dr. Aguilera-Zarate: 1. ¿CUÁL ES EL RÉGIMEN FARMACOLÓGICO QUE UTILIZA PARA OBTENER MIDRIASIS EN EL PREOPERATORIO Y/O TRANSOPERATORIO DE CIRUGÍA DE FACOEMULSIFICACIÓN?

Dr. Guillermo Ortega J.: Habitualmente dilato mis pacientes con mezclas de Tropicamida y Fenilefrina (2,5 o 10%) administradas por 2-3 veces unos 20 minutos antes de la cirugía. Añado con frecuencia AINEs tópicos para mantener esa midriasis en lo posible durante la cirugía.

Dr. Crema: Utilizo colirios de tropicamida 1% + fenilefrina 2.5% de 15/15 minutos 1 hora antes de la cirugía y nepafenaco 3 al día dos días antes de la cirugía.

Dr. Suárez: Pre-operatorio: 1 gota de anestésico tópico Proparacaina (0.5%) o Tetracaina (1%), luego, Tropicamida (1%) o Ciclopentolato (1%), Fenilefrina (10%), una gota de cada una cada 10 minutos por una hora antes de la cirugía.
Trans-operatorio: 0.5 cc de la mezcla de 3cc de Lidocaina al 4% + 9cc de BSS + 4cc de Epinefrina (1:1000). Algunos utilizan Atropina intracamerular (no tengo experiencia con ella).

Dr. Nicoli: Preoperatorio: Fenilefrina 5%, Tropicamina 0.5%, una gota cada 15′, una hora antes de la cirugía. Nepafenac 0.1%, una gota cuatro veces al día, desde 48 horas antes de la cirugía.
Intraoperatorio: una ampolla de Epinefrina sin conservantes, diluida en 500 cc en el suero de irrigación.

Dr. Aguilera-Zarate: 2. DENTRO DE LAS CAUSAS DE MIOSIS PRE Y TRANSOPERATORIAS, ¿CUÁLES SON LAS MÁS FRECUENTES EN SU MEDIO?

Dr. Guillermo Ortega J.: Las causas preoperatorias suelen ser mecánicas: ausencia de respuesta a los midriáticos, sinequias posteriores, fibrosis del iris.
Las transoperatorias son de diversa causa: un floppy iris suele presentar precozmente una miosis intensa al comienzo de la cirugía. La manipulación excesiva dentro de la cámara anterior es otro factor importante. Ocasionalmente un síndrome de retropulsión en miopes altos provoca miosis inestable.

Dr. Crema: Utilización de colirios mióticos para glaucoma y pseudoexfoliación; con la utilización del láser de femtosegundo para cirugía de catarata ahora tenemos incidencia mayor de miosis transoperatoria!!

Dr. Suárez: La más frecuente es Diabetes y Síndrome de Iris Flácido-Laxo (IFIS o SILI) en pacientes masculinos tratados por hiperplasia prostática benigna o femeninas tratadas por incontinencia vesical con alfa-bloqueadores (Tamsulosina, Terazosina, Doxazosina o Alfuzosina). Además la vemos con uso crónico de mióticos, uveítis, pseudoexfoliación de cristalino, sífilis, trauma, anomalías congénitas, etc.

Dr. Nicoli: Pseudoexfoliación, sinequias posteriores por uveítis o cirugías previas.

Dr. Aguilera-Zarate: 3. ¿QUÉ TÉCNICAS DE DILATACIÓN PUPILAR TRANSOPERATORIA PREFIERE EN UN CASO DE DIÁMETRO PUPILAR NO ADECUADO SIN Y CON PRESENCIA DE SINÉQUIAS?

Dr. Guillermo Ortega J.: Usualmente utilizo viscoelásticos dispersivos, con espátulas finas paso por detrás del iris y trato de liberarlo de la cápsula anterior. El mismo viscoelástico ayudará a la midriasis si ese es el problema a resolver. Utilizo ganchos de Becker y Lancaster para hacer una dilatación mecánica con buenos resultados. Finalmente utilizo ganchos retractores de iris en casos que no puedo manejar con las medidas previas.

Dr. Crema: Generalmente hacemos uso intracameral de adrenalina 1:1.000 diluida en solución salina balanceada 1:10 y viscoelástico Discovisc. Si hay presencia de sinequias hacemos sus liberaciones + Discovisc + adrenalina diluida. Con o sin sinequias, si no tenemos un diámetro pupilar => 4mm, utilizamos el anillo de Malyugin de la casa MST. Solamente si no tenemos el anillo de Malyugin disponible utilizamos la técnica de “iris streching”.

Dr. Suárez: Primero inyecto la mezcla conocida como “Shugarcaine”: 0.5 cc de la mezcla de 3cc de Lidocaina al 4% + 9cc de BSS + 4cc de Epinefrina (1:1000) y veo la respuesta pupilar. Si hay sinequias, inyecto viscoelástico cohesivo de alta densidad (DisCoVisc, Healon 5 o Viscoat) para que, con el OVD o la punta de la misma cánula inyectora, tratar de liberar las sinequias.
De no haber sinequias y persistir la miosis, procedo a la dilatación mecánica instrumental. Si se trata de un IFIS – SILI, se puede utilizar el anillo de Malyugin o los ganchos retractores de Grieshaber. Si es una pupila rígida miótica por otras causas se puede intentar con el dilatador pupilar de Behler, o los métodos anteriores.

Dr. Nicoli: En el caso sin sinequias, prefiero la dilatación mecánica con viscoelástica pesada y, de ser necesario, se completa suavemente con dos Kuglen.
En el caso de presencia de sinequias posteriores, realizo la sinequiolisis y membranectomía para completar con dilatación mecánica o retractores de iris.
No me agrada colocar elementos dilatadores en cámara anterior (anillos dilatadores), salvo en un grado importante de IFIS.

Dr. Aguilera-Zarate: 4. ¿QUé MEDIDAS TOMARíA EN CASO DE MIOSIS TRANSOPERATORIA?

Dr. Guillermo Ortega J.: Evaluar profundidad de la cámara anterior (miopes altos, bajar la botella de infusión). Aplico Adrenalina en cámara anterior para abrir la pupila. Si no mejora la situación, hago las maniobras propuestas en la pregunta anterior de manera secuencial. Habitualmente coloco ganchos retractores en el iris.

Dr. Crema: Utilización de adrenalina diluida + Discovisc; emulsificación cuidadosa con auxilio de un instrumento accesorio para apartar el iris.

Dr. Suárez: Si ocurre sin haberse inyectado la mezcla de Epinefrina, se utilizaría en este momento.
Es importante reponer frecuentemente el viscoelástico para mantener la pupila lo más dilatada posible, la cámara anterior profunda y el iris alejado de la incisión.
De no lograse la dilatación esperada, recurrir a los métodos mecánicos (Behler, Malyugin o Greishaber).

Dr. Nicoli: Si no se puede continuar con el procedimiento, tratar de dilatar con la mezcla intracamerular, denominada “Shugarcaine”. De no resultar, usar los retractores de iris.

Dr. Aguilera-Zarate: 5. ¿QUé TéCNICA Y/O MEDICAMENTOS USARíA EN CASOS DE IRIS FLáCIDO MáS MIOSIS?

Dr. Guillermo Ortega J.: Si tengo forma de prever esta situación, utilizo Atropina tópica antes de la cirugía y trabajo con un buen viscoelástico y con maniobras lentas dentro de la cámara. En mi experiencia, suele ser suficiente, pero si es muy severa la miosis, utilizo ganchos retractores de iris.

Dr. Crema: Utilizamos adrenalina diluida (ver respuesta 3), Discovisc, y eventualmente el anillo de Malyugin.

Dr. Suárez: Consultar con el urólogo o médico tratante para ver si es posible el descontinuar el alfa-bloqueador 1 o 2 semanas antes de la cirugía.
Pre-operatorio: Atropina (1%) 1 gota 3 veces al día por 5 días antes de la intervención. Dilatación farmacológica rutinaria inmediatamente antes.
Trans-operatorio: Bajar nivel de la botella de BSS y programar bajos niveles de irrigación-aspiración. Construir una incisión pequeña y autosellante no muy periférica (para alejarnos de la base del iris). Inyectar la solución (Shugarcaine) de Epinefrina. Uso generoso de OVD cohesivo lo que generalmente nos evita tener que recurrir a las dilataciones instrumentales mecánicas. De no conseguirse, sugiero usar el anillo de Malyugin como mejor opción o en su defecto, los retractores fijos de iris de Grieshaber. En caso de IFIS – SILI, no utilizar el dilatador de Behler, ni realizar esfinterectomias o maniobras de “stretching” ya que esto intensificaría la inestabilidad del iris.

Dr. Nicoli: Previamente al paciente se le indica el uso de atropina desde el día anterior, en caso que este medicado con Tamsulosina. Durante la cirugía, de ser necesario, usamos la mezcla “Shugarcaine” y el Anillo de Malyugin.

Datos de Contacto de los Doctores
Dr. Fernando Aguilera-Zarate, e-mail: drfaguilera@yahoo.com.mx
Dr. Juan Guillermo Ortega J., e-mail: jgortega@une.net.co
Dr. Armando Crema, e-mail: acrema@openlink.com.br
Dr. Enrique Suárez, e-mail: ensuca@gmail.com
Dr. Carlos Nicoli, e-mail: cnicoli@oftalmos.com


Foro Catarata 2

Perdida de células endoteliales después de cirugía de catarata con faco

Coordinador: Luis Escaf – Colombia
Panelistas: Dr. Arnaldo Espaillat – Rep. Dominicana, Dr. Eduardo Viteri – Ecuador, Dr. Luis Lu – USA, Dr. Mauricio A. Pérez – USA, Dr. Mauro Campos – Brasil, Dr. Ramón Lorente Moore – España, Dr. Virgilio Centurion – Brasil

Dr. Escaf: 1. ¿HAN HECHO ESTUDIOS DE PéRDIDAS DE CéLULAS ENDOTELIALES EN SUS CIRUGíAS DE FACO? ¿Y CUáNTO PORCENTAJE PIERDEN?

Dr. Espaillat: Sí, he estudiado las pérdidas endoteliales luego de la cirugía de facoemulsificación y el promedio es de 7.80%. En los casos de cirugía de catarata utilizando el láser de femtosegundo es de un 6.74%. Aunque existe una diferencia a favor de las cirugías con láser, no es una diferencia estadísticamente significativa (p=0.31). Estos datos son de una revisión de 226 ojos operados: 113 ojos con facoemulsificación y 113 ojos operados de catarata asistidos con láser de femtosegundo.

Dr. Viteri: Rutinariamente realizamos microscopía especular de endotelio corneal tanto pre como post operatorio en cirugía de segmento anterior. Generalmente la pérdida endotelial es menor al 5% luego de una facoemulsificación con implante de lente intraocular.

Dr. Lu: Realice mi primera faco en 1980 y he realizado 100% facoemulsificación desde 1986. Ciertamente he pasado por una serie de máquinas, instrumentos y técnicas hasta las actuales y al momento uso técnicas de faco diferentes de acuerdo a la densidad del núcleo.
En los 90’s mi perdida era en promedio 5-12% dependiendo de una serie de factores como densidad del núcleo, tiempo de facoemulsificación, cantidad de energía utilizada, edad del paciente, viscoelástico utilizado y cantidad como también el tipo de fluido utilizado durante la cirugía. Ciertamente nuestros resultados mejoraron en los 2000’s bajando a 3-7% debido a que se hacía más cirugía refractiva con lensectomia en núcleos blandos.
El gobierno intervino y ya hace 5 años que no nos permiten hacer estudios de células endoteliales salvo que sea considerado parte del examen de rutina, excepto en casos de distrofias / degeneraciones endoteliales.

Dr. Pérez: No tan sólo no hemos realizado estudios de pérdidas endoteliales en cirugía standard de catarata, sino que pienso que en general el estudio preoperatorio de recuento endotelial no es algo que deba realizarse de rutina. Un examen preoperatorio debe cumplir con la premisa de modificar la conducta a adoptar frente a un determinado caso, y los cuidados intraoperatorios para evitar daño endotelial deben ser idénticos independientes del recuento endotelial (a excepción quizás del tipo de viscoelástico a utilizar). Sí le doy enorme importancia al examen clínico del endotelio corneal, tanto biomicroscopía como reflexión especular, intentando detectar tanto la presencia de córnea guttata, como franco edema en distrofia de Fuchs. En este caso, dado que tanto el polimorfismo y las gutas son visibles, tampoco es necesario la realización de recuento endotelial, ya que sabemos que este paciente requerirá potencialmente algún tipo de trasplante endotelial en el momento en que la córnea se descompense, por lo que debemos anticiparnos durante su facoemulsificación tanto al shift hipermetrópico característico del DSAEK (en estos casos apuntamos a distancia intermedia), como a la leve pérdida de contraste (evitamos tecnología multifocal). Ambas premisas no necesariamente se aplican al DMEK.
Cada examen que realizamos debe obligarnos a realizar la pregunta: ¿Qué conducta voy a modificar con el resultado de este examen? Si la respuesta es ninguna, entonces el examen resulta innecesario.
Sólo utilizamos el recuento endotelial para el seguimiento de nuestros pacientes con prótesis iridianas, lentes fáquicos, injertos corneales y cirugía electiva de recambio de lente intraocular o reconstrucción de segmento anterior.

Dr. Campos: Sí, hemos hecho estudios periódicos para control interno en el hospital. La pérdida endotelial varía entre 7 y 30% en los primeros 6 meses. Esta pérdida está relacionada al tipo de catarata y edad del paciente. Rutineramente no modificamos la técnica patrón y utilizamos viscoelásticos sólo dispersivos. Las cirugías son realizadas por cirujanos de catarata especializados con media de 300 a 600 cirugías por año.

Dr. Lorente Moore: No tengo hechos estudios pormenorizados. Hace tiempo en cataratas normales con energía torsional y viscoelástico dispersivo con condroitín sulfato (Viscoat®) era ±6%, cifra que aumentaba si intentábamos aspirar todo el viscoelástico dispersivo adherido al endotelio.
De los dos centros en los que trabajo, en uno se realiza sistemáticamente microscopía especular con fines diagnósticos para descartar alguna alteración en el endotelio. En el otro centro no lo realizamos sistemáticamente.

Dr. Centurion: Al inicio de los años 90, después no más. Hay que utilizar una medida objetiva por imagen para clasificar los núcleos, independiente de subjetividad, y para cada grado de catarata un parámetro específico con una técnica específica. Esto es muy difícil de realizar, pues cada cirujano tiene una técnica favorita y un viscoelástico de su preferencia.
Creo que en época de LIO Premium, debemos utilizar viscoelásticos Premium para todas las etapas quirúrgicas y es fundamental el estudio de la microscopia especular preoperatoria, y en casos especiales, hacer la microscopia especular pre, post y la paquimetría. No nos olvidemos que con el aumento de la expectativa de vida nuestra cirugía debe ser segura a corto y largo plazo.

Dr. Escaf: 2. ¿MIDEN LA ENERGíA LIBERADA POR EL FACO EN CADA CIRUGíA (EN EL INFINITI ES EL CDE – CANTIDAD DE ENERGíA DISIPADA)?

Dr. Espaillat: El CDE promedio (incluyendo en el análisis todos los tipos de dureza de catarata) medido en la revisión anteriormente mencionada fue de 10.39 para los casos de facoemulsificación y de 9.17 para los casos en donde se empleó el láser de femtosegundo. La diferencia tampoco fue estadísticamente significativa.

Dr. Viteri: Documentamos en video todas las cirugías de Facoemulsificación y al final de cada cirugía registramos todos los parámetros de fluídica y de energía utilizados.

Dr. Lu: Pues sí, lo hacemos de rutina y dictamos en el reporte operatorio. CDE (Cummulative Dissipated Energy) = Average U/S Power x U/S Time, o sea el poder promedio de ultrasonido por el tiempo de uso. Cuando se utiliza la energía torsional (Average torsional amplitude x torsional time x 0.4) sola el CDE mide solo la energía torsional, pero cuando se tiene el IP el CDE = (Average US Power X US Time) + (Torsional Energy). Para RLE (Refractive Lens Exchange) mi CDE promedio es 3.26. Para núcleo 1+ el CDE promedio es 6.82. Para núcleo 2+ el CDE promedio es 10.34. Para el 3+ 22.90, y no tengo 4 + en mi practica desde el 2011.

Dr. Pérez: En el caso de la cantidad de energía disipada (CDE), tampoco creo que sea un factor modificador de conductas por lo tanto no es un valor que tomemos en consideración. En primer lugar, el valor final de CDE en un determinado caso es una información que se obtiene una vez finalizada la facoemulsificación, por lo que ese dato no va a generar ningún cambio intraoperatorio. Segundo, no considera el plano en que esa energía está siendo liberada ni las técnicas quirúrgicas utilizadas para evitar daño endotelial, por ende, el valor final de CDE no es en lo absoluto directamente proporcional con un mayor daño endotelial.
El valor final de CDE, que es sólo proporcional al tiempo y poder de la facoemulsificación, debe ser el necesario para completar el procedimiento en forma segura, va a depender del tipo de catarata que estemos enfrentando y no debe ser considerado una limitante ni un factor modificador de conducta.

Dr. Campos: Generalmente baja, raramente excede 10 segundos.

Dr. Lorente Moore: No la mido de rutina. En el año 2011, presentamos un trabajo en el Congreso Europeo (ESCRS) de Viena, comparando en cataratas muy duras la CDE utilizando la punta de Ultrachopper (L. Escaf) con una punta Kelman 45º mini-flared. En ambos con energía torsional con IP. Los resultados fueron de 15.75 ± 7.09 con la punta ultrachopper y de 20.99 ± 14.47 con la punta Kelman. Lo que supone un 20% menos con el Ultrachopper, aunque siempre he observado que hay mucha variabilidad en la medición de la CDE.

Dr. Centurion: Sí, es rutina y para los núcleos medios NO3 NC3 la media es un CDE + 6-7.

Dr. Escaf: 3. ¿QUé VISCOELáSTICO USAN PARA LA REXIS Y PARA LA FACO?

Dr. Espaillat: Utilizo un viscoelástico cohesivo (Provisc) para la realización de la rexis capsular y un viscoelástico con propiedades tipo cohesivo-dispersivo (DisCoVisc) durante la facoemulsificación. En caso de que el contaje endotelial sea bajo (menos de 1,800 células/mm2), entonces utilizo un viscoelástico dispersivo tipo Viscoat para proteger más al endotelio corneal durante la facoemulsificación.

Dr. Viteri: En casos de cataratas con núcleo blando a moderado utilizo DiscoVisc para todos los pasos de la cirugía. En núcleos duros o cuando el contaje endotelial es inferior a 2.000 cel/mm2 protejo el endotelio con Viscoat, tanto durante la Rexis como durante la Facoemulsificación, realizando frecuente relleno de cámara anterior durante la aspiración de los fragmentos. La implantación del lente intraocular generalmente la efectúo sin viscoelástico, solamente con BSS en irrigación continua (hidroimplante), excepto en casos combinados con trabeculectomía, iris flácido o defectos en cápsula/zónula.

Dr. Lu: Actualmente utilizo el DuoVisc. VisCoat para la capsulotomia y facoemulsificación, para luego utilizar el ProVisc antes de introducir el implante.

Dr. Pérez: En la gran mayoría de los casos, prefiero un viscoelástico que tenga tanto características cohesivas como dispersivas, siendo el de mi preferencia el DiscoVisc (Alcon, Fort Worth, TX, U.S.). En los únicos casos en que utilizo un viscoelástico exclusivamente dispersivo, tanto para la Capsulorhexis como para la protección endotelial durante la facoemulsificación, pensando en proporcionar una protección teórica adicional, es en pacientes en que se ha evidenciado daño endotelial previo en el examen preoperatorio, ya sea gutas en reflexión especular o franco edema estromal, siendo el de mi elección el Viscoat (Alcon, Fort Worth, TX, U.S.). Abandoné la técnica de soft-shell (uso mixto de viscoelástico dispersivo asociado a un segundo viscoelástico cohesivo) cuando empecé a utilizar incisión de 2.2 mm, realizando la capsulorhexis con el MST Capsulorhexis Forceps (MST, Redmond, WA, U.S.), con lo que prácticamente se elimina tanto la pérdida de viscoelástico durante la capsulorhexis como la necesidad de utilizar un viscoelástico cohesivo para mantener la profundidad de cámara anterior.

Dr. Campos: Solamente dispersivos.

Dr. Lorente Moore: Utilizo un viscoelástico dispersivo con condroitín sulfato tipo Viscoat® para realizar la rexis y la facoemulsificación. En caso de realizar la rexis con cistitomo (incisión de 1.8mm) utilizo un viscoelástico cohesivo tipo Provisc® ya que me facilita el desplazamiento del colgajo. El utilizar Viscoat® es debido a la costumbre de tantos años, aunque para los que empiezan quizá fuera mejor la técnica del Escudo de Arshinoff. Durante la facoemulsificación prefiero el Viscoat® pues protege el endotelio y permanece en la cámara anterior. En cataratas muy duras inyecto 1 o 2 veces en la fase de emulsificación de fragmentos e incluso en el saco capsular si no hay córtex que lo proteja.
Para implantar la lente siempre utilizo uno cohesivo fácil de aspirar.

Dr. Centurion: 1º) DiscoVisc para la rexis y el implante de la LIO; 2º) Completo con Viscoat para la faco (un poco exagerado!!).

Dr. Escaf: 4. ¿QUé CANTIDAD DE LíQUIDO USAN?

Dr. Espaillat: En los casos de facoemulsificación el gasto promedio fue de 50.87 ml y en los casos de cirugía de catarata asistida con láser de femtosegundo fue de 49.73 ml. Esos son datos basados en la revisión mencionada en la primera pregunta.

Dr. Viteri: En la facoemulsificación y aspiración utilizo entre 50 y 80 cc de BSS. Durante la implantación del lente intraocular entre 5 y 6 cc en lentes esféricos y entre 20 y 30 cc en lentes tóricos (técnica de hidroimplante). Registramos tanto el volumen aspirado por el equipo Infiniti como el peso del líquido utilizado (1g=1cc).

Dr. Lu: El líquido de infusión que usamos de rutina es la botella de BSS de 500cc excepto en pacientes con distrofias endoteliales, PEX, cataratas 3+ y 4+, y cuando se esperan cirugías complejas. En cirugías de rutina, el promedio de BSS utilizado en total es de 100-250cc. En núcleos blandos se usan un promedio de 25-30cc; núcleo 1+ 40-50cc; núcleo 2+ 40-100cc; núcleo 3+ 120-150cc; núcleo 4+ >200cc.
La I&A me requiere un promedio de 100cc extras.

Dr. Pérez: La cantidad de líquido a utilizar durante una cirugía va a depender por sobretodo de la complejidad del caso en cuestión, y por ende, del tiempo necesario para completar la cirugía en forma segura. Una vez más, la cantidad de líquido utilizado al final de cada cirugía no va a ser inversamente proporcional al nivel de éxito de la cirugía. A modo de ejemplo, el manejo teórico clásico de una rotura de cápsula posterior o de prolapso vítreo en casos de reconstrucción de segmento anterior incluye bajar la altura de la botella, disminuyendo así tanto la cantidad de líquido infundido como la presión en cámara anterior. El vítreo es un fluido que se mueve por gradiente de presiones, por lo que disminuir la presión en cámara anterior va a favorecer el prolapso vítreo, aumentando el riesgo de tracción retinal y potenciales desgarros. Por ende, en estos casos de presencia de prolapso vítreo es preferible mantener la altura de la botella, o incluso elevarla, lo que si bien nos va a obligar a u tilizar una mayor cantidad de líquido, también nos va a permitir mantener un gradiente de presión contrapuesto al prolapso, ya que nuestro objetivo principal en este caso, no es evitar la luxación de fragmentos nucleares, sino evitar al máximo la tracción retinal. En resumen, menos líquido no siempre es la respuesta correcta y este conjunto de parámetros deben ser utilizados como guías y no como limitantes quirúrgicos.

Dr. Campos: 60 a 130 ml de BSS.

Dr. Lorente Moore: Si aceptamos la medida que nos indica el aparato de facoemulsificación utilizo entre ±30cc para cataratas blandas y hasta ±80cc para cataratas duras, variando según el grado de dureza.
Sin embargo en otro trabajo que presentamos en la ASCRS del 2011 comparando el líquido utilizado entre dos sistemas diferentes pero pesando la botella antes de la cirugía y al finalizarla, la cantidad era mayor, entre ±50cc y ±100cc según el grado de dureza. El purgado del sistema era realizado con una botella diferente.

Dr. Centurion: + 100 cc/cirugía.

Dr. Escaf: 5. ¿EN PROMEDIO CUANTO TIEMPO SE DEMORAN POR CIRUGíA?

Dr. Espaillat: El tiempo promedio de cirugía (incluyendo en el análisis todos los tipos de dureza de catarata) fue de 13 minutos 42 segundos en los casos de facoemulsificación y de 18 minutos 35 segundos en los casos de cirugía de catarata asistida con láser de femtosegundo. Aquí sí hubo una diferencia estadísticamente significativa (p<0.05).

Dr. Viteri: En casos rutinarios de cataratas seniles, sin patología asociada, nos toma entre 5 y 10 minutos

Dr. Lu: Ocho a doce minutos.

Dr. Pérez: El promedio de una cirugía de facoemulsificación standard bordea los 10-12 minutos, sin embargo la importancia de estimar el tiempo de cada cirugía está dada únicamente en planificar el flujo del pabellón. El peor enemigo en cada cirugía es la complacencia, ya que es en las cirugías que consideramos rutinarias y “standard” en que olvidamos la atención a los detalles, creando oportunidad para la aparición de complicaciones. Es más, el tiempo quirúrgico va a depender de los distintos desafíos que debamos enfrentar caso a caso, tales como manejo de debilidad zonular, placas en la cápsula posterior con necesidad de capsulorhexis posterior primaria, fijación adicional del lente intraocular, etc.

Dr. Campos: De 5 a 9 minutos.

Dr. Lorente Moore: El tiempo de duración de una catarata normal es de 6-7 minutos. Dónde hay más demora es entre cirugías y viene siendo ±12 minutos, de manera que hacemos 7 cataratas cada 2 horas.

Dr. Centurion: En media hago 4 cirugías/hora, en dos salas, con el tiempo quirúrgicos de + 7 minutos.

Dr. Escaf: 6. ¿QUé CLASIFICACIóN USAN PARA LA DUREZA DEL NúCLEO? (LOCS III U OTRA).

Dr. Espaillat: Utilizo la clasificación BCN-10 desarrollada en la Clínica Barraquer de Barcelona, España, por los Dres. Rafael Barraquer, Felipe Tsiplakos, Marcos álvarez Fischer y Alejandro álvarez López. Ver imagen abajo.

 

 

Dr. Viteri: Hace varios años utilizamos la clasificación LOCS III, para lo cual realizamos el curso y examen de certificación.

Dr. Lu: Usamos el LOCS III (Lens Opacities Classification System III) para la clasificación cuando hacíamos los estudios y ser publicados. En la actualidad usamos el Wilmer que clasifica los núcleos de 1-4+ para clasificar y simplificar nuestras cirugías. Núcleo blando = Flip; núcleo 1+ = Pre-chop; núcleo 2+ = Pre-chop; núcleo 3+ = Stop and Chop; núcleo 4+ = Faco-Chop / UltraChop.

Dr. Pérez: Personalmente utilizo una versión bastante similar a la clasificación LOCS III, con algunas modificaciones para detallar algunas características de la catarata que no se encuentran actualmente incluidas, tales como la presencia de vesículas intralenticulares o de espículas corticales en el eje visual, que muchas veces pueden ser determinantes en la indicación quirúrgica y en las manifestaciones clínicas.

Dr. Campos: No usamos LOCS, clasificamos en cruces, entre 1-4. Catarata rubra y nigrans serían tipo 5.

Dr. Lorente Moore: En un ensayo clínico que estamos haciendo actualmente nos imponen (los americanos) hacerlo con LOCS II. Personalmente prefiero hacerlo con LOCS III y la clasificación de Barraquer que utilizamos sistemáticamente en el hospital.

Dr. Centurion: Utilizo la LOCS III. 1º) Clasificamos durante la consulta; 2º) Confirmamos durante la cirugía.

Dr. Escaf: 7. SI USA LOCS III, ¿CUáL ES EN SU APRECIACIóN LA DISTRIBUCIóN % DE SUS CATARATAS?

Dr. Espaillat: No utilizo esta clasificación. Si realizo una analogía de la clasificación BCN-10 a la división entre 1 y 4 cruces (+) según el grado de dureza de la catarata, entonces la distribución de las cataratas que realizo es de un 14% grado 1 (+), un 40% son grado 2 (+), un 35% son grado 3(+) y un 11% de las cataratas que hago son Nigrans.

Dr. Viteri: 1.0 – 2.9 20% (facorrefractiva); 3.0 – 3.9 10%; 4.0 – 4.9 20%; 5.0 – 5.9 30%; 6.0 – 6.9 20%.

Dr. Lu: Nucleo 0 – 10 %; Nucleo 1+ – 10 %; Nucleo 2+ – 70 %; Nucleo 3+ – 9 %; Nucleo 4+ – 1 %; Nucleo 5+ – 0 %.

Dr. Pérez: Es bastante variable, y pese a no considerarlo un factor importante, ya que lo importante en una decisión quirúrgica es la repercusión clínica de la catarata, tengo la impresión que las cataratas clínicamente significativas más frecuentes son las de predominio nuclear, lo que no quita que muchos pacientes tengan indicación quirúrgica y sintomatología al sólo presentar componente cortical. Esta proporción va a depender además de las características demográficas de una determinada población, como lo es por ejemplo una mayor proporción de cataratas con componente subcapsular posterior en la subpoblación de pacientes diabéticos o secundarias al uso de esteroides.

Dr. Campos: La mayoría entre 2-3 cruces. Catarata nigrans es muy rara y catarata 4 cruces aparece 1 em cada 20 casos.

Dr. Lorente Moore: 30% cataratas grado 1-2; 50% cataratas grado 3-4; 20% cataratas grado 5-6. El problema mayor es que tenemos un 24% de pseudoexfoliación.

Dr. Centurion: La mayoría (> “50%”) de NO3 NC3. Muy raramente catarata nigrans y blancas. Creo que vemos más frecuentemente gente joven (+ 40a) con subcapsular posterior.

Datos de Contacto de los Doctores
Dr. Luis Escaf, e-mail: escaff@gmail.com
Dr. Mauricio A. Perez, e-mail: mperez@gmx.us
Dr. Arnaldo Espaillat, e-mail: mscampos@uol.com.br
Dr. Mauro Campos, e-mail: humanavision@gmail.com
Dr. Eduardo Viteri, e-mail: cnicoli@oftalmos.com
Dr. Ramón Lorente Moore, e-mail: rlorenteoftal@gmail.com
Dr. Luis Lu, e-mail: mdeyes203@hotmail.com
Dr. Virgilio Centurion, e-mail: centurion@imo.com.br



Catarata: Ciencia – Arte – Experiencia

Noticiero ALACCSA-R pregunta, colaboración del Dr. Virgilio Centurion – Brasil:

Paciente del sexo femenino con 50 años, presenta disminución de la AV para lejos en AO, peor en el OD. Utilizó pilocarpina (colirio) por +18a, actualmente utiliza latanoprost (Xalatan® – Pfizer) 1 vez/día. Ha hecho 2 veces laser para glaucoma en AO. Refiere que tiene diagnóstico de catarata. No mejora la visión con corrección para lejos, tiene visión “razonable” sin corrección de cerca.
Es médica, trabaja con estética, caso sea operada no quiere utilizar gafas ni de lejos ni de cerca porque participa semanalmente de programa de TV.
Examen oftalmológico:

 

Exámenes complementares:

 

1- ¿Cómo planificaría la cirugía?; 2- ¿Cómo trataría la pupila?; 3- LIO: ¿monofocal o multifocal?; 4- ¿Cuál la mayor preocupación en la cirugía?

 

 

Dr. Frederico França Marques – Brasil
E-mail: fredani2010@terra.com.br

Se trata de un caso desafiador con peculiaridad tanto en la programación quirúrgica como en el procedimiento quirúrgico en sí.
Planificación quirúrgica: Este paciente tiene algunas características relevantes, tales como:
1. Pupila pequeña: la asfericidad de una lente intraocular no promoverá ningún beneficio adicional en comparación a lente esférica una vez que probablemente esta pupila en condiciones mesópicas no pasará de los 3.5-4.0mm.
2. Glaucomatoso: depende del contraste para la realización y seguimiento confiable del glaucoma a través de la campimetría, por lo tanto, la elección de una lente bi o multifocal deja de ser la mejor opción (corroborada por el tamaño de la pupila en los casos de las LIOs multifocales pupilo-dependientes).
Por lo tanto, teniendo en vista el deseo de quedar sin gafas, explicaría sobre monovisión, programando primero el ojo derecho para lejos (+/- 0.50) y el segundo (OI) para cerca entre -1.50 a -2.00D dependiendo de la AVSC de cerca del primer ojo (OD) y utilizaría una LIO monofocal (esférica o tórica, si hay astigmatismo corneal > 1.0D). Además, adecuaría su expectativa para que tenga una reducción de la dependencia de gafas y no su completa independencia, aunque en la gran mayoría de los pacientes se logra este objetivo.

Cuidados trans operatorios:
1. Consideraría realizar la cirugía bajo bloqueo anestésico (peribulbar) considerando una manipulación en el iris por las sinequias.
2. La incisión debe tener un túnel más prolongado para evitar hernia de iris debido a la presencia de cámara anterior estrecha.
3. Después de la incisión y sinequiolisis introduciría adrenalina diluida 1:10 BSS y evaluaría, si la pupila tiene 5mm o mayor, haría la cirugía sin problema; si por ventura no avanza bien consideraría el uso de ganchos de iris o del anillo dilatador de Malyugin. Observar la presencia de membrana pupilar inflamatoria, si está presente, eliminarla con pinza Utrata.
4. Los otros pasos quirúrgicos sin alteraciones.

Dr. Luis Escaf – Colombia
E-mail: escaff@gmail.com

En respuesta al caso enunciado hay varias consideraciones.
La cirugía en sí no tiene mayores problemas, tratar de dilatar la pupila con instrumentos dilatadores (kuglen, Malyugin, otros). Si se consigue una dilatación mayor de 4.5 mm se puede trabajar la faco sin dilatar mecánicamente la pupila.
El consenso general es que en pacientes con glaucoma y diabetes hay que tener más precaución al momento de elegir el lente intraocular, siendo más conservador con los multifocales.
Aún sin conocer datos de campo visual y OCT macular, yo implantaría un LIO monofocal hidrofóbico sin filtro amarillo y calcularía la lente para monovisión.

Dr. Agustín Carron – Paraguay
E-mail: agustincarron@hotmail.com

En primer lugar tendríamos que identificar los desafíos que nos plantea este caso, es decir las situaciones que nos obligan a adoptar una conducta diferente a la rutinaria y nos ayudarán a planificar una cirugía exitosa.

Dificultad 1: Pobre dilatación pupilar.
Aumenta la incidencia de rotura de cápsula posterior y pérdida de vítreo.
La dilatación mecánica lleva aparejada el riesgo de alterar de manera permanente la funcionalidad del esfínter pupilar; esto puede generar deslumbramiento asociado a la midriasis por lesión del esfínter (no olvidar que la paciente participa en programas de TV que utilizan potentes artefactos de iluminación generalmente con incidencia frontal).

Dificultad 2: Escasa profundidad de la cámara anterior.
Mayor pérdida endotelial asociada a la facoemulsificación.

Dificultad 3: Profesión del paciente y su expectativa de los resultados de la cirugía.
Interrogatorio minucioso: punto clave
Distancia de trabajo utilizada con mayor frecuencia
Uso de computador
Tamaño de letra utilizada en su lectura habitual
¿Estaría dispuesta a utilizar gafas para realizar los trabajos relacionados a su profesión, aun pudiendo prescindir de ellas para sus apariciones en la TV?

Plan quirúrgico
Incisión principal de 2.2 mm ubicada en meridiano más curvo o de lo contrario en región temporal; dos paracentesis. Inyección de Viscoat®; liberación de las sinequias con espátula; nueva inyección de viscoelástico; con una pinza de Utrata se procede a eliminar las membranas inflamatorias del borde pupilar; con un movimiento similar al que hacemos en la capsulorrexis.

Pupila: Primero intentaría viscodilatación con Healon 5®, con el objetivo de lograr una pupila de 5 mm aproximadamente que sería el diámetro adecuado de la capsulorrexis; en caso de no lograrla con la viscodilatación haría el denominado stretching pupilar con los ganchos de Kuglen de manera muy suave para no lesionar excesivamente el esfínter y como mencioné antes mi objetivo es lograr un pupila de 5 mm. En el caso de no conseguir el objetivo procedería a implantar 4 retractores de iris (pero que casi con seguridad producirán desgarros del esfínter pupilar y atonía pupilar relativa)
Luego procedo a realizar la capsulorrexis de manera habitual y la facoemulsificación con la técnica de Quick Chop; ya que disminuye el tiempo de US; y nos permite trabajar de manera segura con diámetros pupilares pequeños. Se inyecta viscoelástico una o dos veces más durante la emulsificación del núcleo para proteger el endotelio.
Elegiría implantar LIO monofocal, utilizando la técnica de monovisión con una miopía de -1.50 D en el ojo no dominante; lo que permitiría a la paciente participar de los programas de TV, leer a una distancia de 40 cm aproximadamente siempre que la tipografía no sea tan pequeña y utilizar el computador. Probablemente si realiza procedimientos estéticos que requieran una distancia de trabajo menor o visualización de cosas pequeñas deberá utilizar unas gafas adicionales; situación que deberá ser explicada en el preoperatorio. No optaría por lente multifocal debido a que no puedo predecir la funcionalidad del esfínter en el postoperatorio y las lentes a las que tengo acceso dependen de la pupila para su funcionamiento. Además de la gran posibilidad de que la paciente se queje de visión de halos; por eso mi mayor preocupación sería mantener la funcionalidad del esfínter pupilar.

Dr. Juan Guillermo Ortega J. – Colombia
E-mail: jgortega@une.net.co
1. Hay varios aspectos complejos en este caso que conviene analizar desde antes de la cirugía. Yo comenzaría por indagar acerca de las motivaciones visuales de la paciente, tiene 50 años, médica y esteticista, tiene un PAM adecuado, así como un recuento endotelial con ligera disminución pero que puede ser manejado con cuidado en cirugía, y asumo que sigue siendo una persona activa, por lo que considerar un lente multifocal es importante. Por otro lado, el antecedente de glaucoma, genera otras consideraciones: compromiso campimétrico? Estabilidad o no de su problema glaucomatoso?. La profundidad de cámara anterior descrita como panda, no parece tan severa en la imagen del Pentacam, pero igual habrá que ir preparado para operar en un ojo de cámara estrecha. La pupila finalmente es un tema complejo de analizar: habrá que establecer una estrategia para romper las sinequias, mediante viscoelásticos y espátulas (incluso ganchos de tracción intraoperatorios) que aseguren una buena midriasis transoperatoria, pero que igualmente dejen una pupila adecuada y funcional postoperatoriamente.
2. Siempre intento dilatar preoperatoriamente en el consultorio, porque me da una idea de cuánto puedo esperar en cirugía. En este caso, seguramente poco o nada habrá de midriasis. En cirugía, como comenté al comienzo, utilizo viscoeláticos para profundizar la cámara y con espátula libero las sinequias avanzando hacia el ecuador del cristalino. Mediante ganchos (Becker, Lancaster) hago una dilatación mecánica, que me permita abrir la pupila razonablemente. Si no es posible, uso ganchos de retracción de iris (4). En la cirugía procedo con cuidado evitando lastimar el esfínter pupilar y levantando el iris en cada cuadrante para asegurarme de no dejar restos de núcleo o de corteza retroiridianos que pudieran generar inflamación postoperatoria. Al final si hay mucha distorsión del esfínter conviene aplicar un miótico en cámara anterior y evaluar la contracción pupilar.
3. En cuanto al tipo de lente intraocular, conviene establecer de antemano con la paciente, sus preferencias. El tipo de lente si es multifocal, debe ser pupilo independiente. Asegurarse de que quede bien implantado dentro del bag. Estos pacientes con catarata y tan mióticos suelen tener una visión cercana sorprendentemente buena por los cambios miópicos del cristalino, pero también por aumento de profundidad de foco por la miosis, y es importante tener en cuenta que visión preoperatoria cercana tiene la paciente, para evitarse disgustos y/o malos entendidos.
4. Las preocupaciones fueron descritas a lo largo de las respuestas anteriores. Pueden clasificarse en:
a. Mecánicas: abrir la pupila de una manera atraumática, y asegurarse que quede funcional y parecida a la preoperatoria.
b. Quirúrgicas: cámara anterior estrecha, iris fibroso, mala respuesta dilatadora, dificultad para visualizar la rexis, o corteza o restos nucleares residuales, dificultad para asegurarse de que el lente quede efectivamente dentro del saco capsular.
c. ópticas: la elección del tipo de lente es cada vez más importante en el proceso de la cirugía. Estas pacientes finalmente juzgarán el resultado sobre la premisa de su calidad visual. El glaucoma, la pupila, y las expectativas visuales de la paciente son determinantes de lo que debiera ser una cirugía exitosa o un fracaso…

DESENLACE DEL CASO:
Caso desafiador (el pedido de la paciente de no utilizar corrección en el postoperatorio porque trabaja en la televisión …), la pupila pequeña con sinequias, discreta miopía …, no utiliza corrección óptica.
Después de la discusión detallada la paciente optó por el implante de LIO multifocal, con posibilidad del cirujano decidir durante la cirugía la sustitución por monofocal, caso tuviese dificultades quirúrgicas.
Las cirugías de ambos ojos, bajo anestesia peribulbar y sedación, con liberación de las sinequias y stretch suave, transcurrieron sin anormalidades, implantamos la LIO multifocal AcrySof ReSTOR (SN6AD1 – +3.00) y la refracción postoperatoria fue de:
OD: plana         con AV: D: 20/20
OI: -1.00 60º         I: 20/40 s/c 20/20 c/c
Pupila con la función normal. No utiliza corrección.



SBAO – Sociedade Brasileira de Administração em Oftalmologia

Finanzas e inversiones: El cambio y su impacto en la vida personal y profesional del médico

Rogério Nakata – Brasil
Planificador Financiero Certificado, CFP®
E-mail: rogerio.nakata@economiacomportamental.com.br

Para entender cómo el cambio puede influir en la vida de los profesionales de la salud y sus decisiones financieras tenemos que primeramente conocer, de manera simple, lo que significa los tan comentados cambio depreciado y cambio apreciado.
Primeramente, precisamos entender que la tasa de cambio refleja el costo de una moneda en relación a otra y que toda esta depreciación y apreciación se produce debido a las fuerzas de oferta y demanda del mercado popularmente conocida como la ley de oferta y demanda que puede ser comprendida por el sentimiento de que todo que es “más raro es siempre más caro”. Esto significa que cuanto menor la cantidad de moneda en circulación en la plaza mayor es su precio y viceversa.
El cambio está depreciado cuando necesitamos de más reales para comprar un dólar y decimos que el cambio está apreciado cuando ocurre lo contrario, es decir, cuando necesitamos de más dólares para comprar un real.
En el cambio apreciado, cuando el dólar aumenta, los productos importados quedan también más caros disminuyendo la oferta de estos productos y de su competencia con los productos nacionales elevando el índice de inflación que nada más es el aumento generalizado de los precios.
Ya en el cambio depreciado, cuando el precio del dólar baja y se consigue comprar más dólares con la misma cantidad de reales, los productos importados son más baratos aumentando la competencia con los nacionales y, por consecuencia, los precios bajan y la inflación disminuye. Una desventaja para nuestro país, que es un gran exportador de commodities, que son productos que tienen las mismas características de negociación en cualquier parte del mundo y cuyos precios son determinados internacionalmente, como el café, la soja, el mineral de hierro, el azúcar, el jugo de naranja, etc., es que estos se vuelven más caros para ser vendidos a otros países disminuyendo las ventas de los empresarios exportadores. Como resultado, las empresas exportadoras para no tener pérdidas más significativas almacenan productos al máximo, a la espera de una nueva valorización del dólar, ocasionando un aumento en los estoques y consecutivamente una reducción masiva en los costos. Por eso, el gobierno a fin de evitar que el real se valorice aún más hace subastas de reservas o sobretasa el ingreso de capital extranjero para retroceder esa cotización, minimizando el riesgo de capital especulativo dirigido a lograr grandes beneficios en corto espacio de tiempo, es decir, al restringir el ingreso de dólares el precio de la moneda extranjera vuelve a subir equilibrando de nuevo las fuerzas de oferta y demanda del mercado. Como la tasa de cambio adoptada por Brasil es la fluctuante o flexible, el BCB (Banco Central de Brasil) entra en subastas diarias de compra y venta de moneda, con el fin de mantenerla en un límite máximo y mínimo predeterminado por el gobierno. Esto significa que a pesar del precio de la moneda ser determinado por el mercado, siempre hay una “mano amiga” del gobierno para que la misma no huya del control y no interfiera en su política macroeconómica.
Otra cosa importante es que el cambio también es influenciado por las variaciones de la tasa Selic (tasa básica de la economía brasileña), que sirve de referencia para las aplicaciones en renta fija, es decir, cuanto mayor esa tasa ofertada a los inversores (actual 8,00% al año) más capital extranjero, que en su mayoría, como hemos visto, es especulativo, es atraído, por eso la necesidad de disminuirnos la misma a niveles de países más desarrollados. Sin embargo disminuyendo la tasa y no realizando las debidas reformas en el campo fiscal, tributario y destinando recursos para la inversión en infraestructura del país, se convierte en una cuestión de tiempo para que la inflación regrese a molestar.
Para la clase médica, creo que, con la apreciación del cambio, existe ahí una ventana de oportunidades, que podrá no quedarse abierta por mucho tiempo para la compra de materiales y equipos importados del segmento oftalmológico para que puedan o disminuir sus costos operacionales o aumentar su capacidad de producción. Por lo tanto, tal vez sea la hora de repensar en los procesos, de anticipar deudas en moneda extranjera y de colocar todo en la punta del lápiz para que se puedan tomar decisiones importantes con relación a su actividad o a su negocio. Otra oportunidad también significativa para esos profesionales es que, con el aumento de la esperanza de vida de los brasileños, el país cada año se está volviendo “más viejo” siendo que la esperanza es que en 2042 tengamos más personas mayores de 60 años que en el Japón (país más envejecido actualmente) y que será aún más necesaria la presencia actuante e importante de los oftalmólogos para tratar las necesidades características del efecto de la edad, como catarata, diabetes, glaucoma, enfermedades maculares, etc.
Para finalizar, el gran reto del Gobierno en este momento es, y continuará siendo, el desarrollo y el crecimiento económico, donde el ideal es que no se base únicamente en medidas puntuales que beneficien aquel o ese sector, pero que pueda “ver más allá” de todos los segmentos, tomando iniciativas que puedan: reducir la carga tributaria; reformular la política laboral aliviando la planilla de pagos y generando más empleos; cortar con urgencia los elevados gastos públicos; invertir en infraestructura para reducir los costos de transporte y logística, ampliando la oferta de insumos básicos de manera eficiente; reducir las tasas de interés en las financiaciones, ampliando la oferta de seguros y garantías; y, por último, promover la innovación a través de una buena educación, calificación profesional, de incentivos a la cultura y al desarrollo de nuevas tecnologías, sin olvidarse de la salud de la población que necesitará de más y más cuidados, incluso como hemos visto en el campo de la visión, conforme el país va envejeciendo.


Calendario 2013
  • XXXI Congress of the ESCRS
    Octubre 05 – 09, Netherlands – Amsterdam
    Informaciones: www.escrs.org
  • AAO Annual Meeting
    Noviembre 16 – 19, New Orleans, LA – USA
    Informaciones: www.aao.org
  • Joint Meeting Bascom Palmer Eye Institute
    & Fundación Oftalmológica los Andes

    Diciembre 05 – 07, Santiago de Chile
    Informaciones: www.oftalandes.cl

 

 

PROGRAMA CIENTíFICO

Jueves, 21 de noviembre de 2013

Don Alberto
Doña Adelita
Don Julian
08:00 – 09:00
Ametropías Extremas
TASS y Endoftalmitis
Taller de OCT
09:00 – 10:00
LIO en Refractiva Previa
Importancia de la Superficie Ocular en Cirugía
Taller de IOL Master
10:00 – 11:30
Femtosegundo en Catarata
Ectasias y su manejo
Taller de Topografía, Pentacam, Cirus, Galilei, CRS Master
11:30 – 12:00
Receso
Receso
Receso
12:00 – 12:20
Inauguración
Inauguración
Inauguración
12:20 – 13:00
Lo mejor de ASCRS, FacoElche, SECOIR y ESCRS 2013
Lo mejor de ASCRS, FacoElche, SECOIR y ESCRS 2013
Lo mejor de ASCRS, FacoElche, SECOIR y ESCRS 2013
13:00 – 14:30
Presbicia I
Uveítis y Catarata
Trabajos Libres I
14:30 – 15:00
Receso
Receso
Receso
15:00 – 17:00
Cirugías en Vivo Bausch and Lomb
Cirugías en Vivo Bausch and Lomb
Cirugías en Vivo Bausch and Lomb
17:00 – 19:00
Tarde de la Industria
Tarde de la Industria
Tarde de la Industria
19:30 – 21:30
Coctel de Bienvenida
Coctel de Bienvenida
Coctel de Bienvenida

Viernes, 22 de noviembre de 2013

Don Alberto
Doña Adelita
Don Julian
08:00 – 09:00
Catarata Congénita
QPP, DSAEK, DALK, DMEK
Profilaxis en Cirugía de Catarata
09:00 – 10:00
Faco en Cataratas Duras
Crosslinking
Catarata Traumática
10:00 – 11:30
Cálculo de LIO en casos especiales
Femtosegundo en Córnea
Manejo de Afáquia
11:30 – 12:00
Receso
Receso
Receso
12:00 – 13:30
Presbicia II
Polo Posterior y Catarata
Técnicas de Faco
13:30 – 15:00
Manejo de Astigmatismo Parte I
Glaucoma y Catarata
Trabajos Libres II
15:00 – 15:30
Receso
Receso
Receso
15:30 – 17:30
Cirugías en Vivo Alcon
Cirugías en Vivo Alcon
Cirugías en Vivo Alcon
17:30 – 19:00
Concurso Internacional de Vídeos
Concurso Internacional de Vídeos
Concurso Internacional de Vídeos
20:00
Cena de Profesores
Cena de Profesores
Cena de Profesores

Sábado, 23 de noviembre de 2013

Don Alberto
Doña Adelita
Don Julian
09:00 – 10:30
Manejo de Astigmatismo Parte II
Superficie Ocular
Trabajo Libres III
10:30 – 11:30
Complicaciones en Segmento Anterior
Controversias en Cirugía Refractiva
Facorrefractiva
11:30 – 12:00
Receso
Receso
Receso
12:00 – 12:15
Premiación al mejor Trabajo Libre, Cartel y Vídeo
Premiación al mejor Trabajo Libre, Cartel y Vídeo
Premiación al mejor Trabajo Libre, Cartel y Vídeo
13:15 – 14:30
Olvidando las complicaciones servido con tequila y antojitos
Olvidando las complicaciones servido con tequila y antojitos
Olvidando las complicaciones servido con tequila y antojitos

Calendario 2014
  • XXII Curso Regional Panamericano
    Febrero 21 y 22, Ciudad de Panamá – Panamá
    Informaciones: www.paao.org
  • IV Congreso Internacional Barranquilla Facorrefractiva
    Marzo 06 – 08, Barranquilla – Colombia
    Informaciones: www.congresofacorefractiva.com
  • XIII Congresso Internacional de Catarata e Cir. Refrativa
    IX Congresso Internacional de Adm. em Oftalmologia

    Abril 02 – 05, Rio de Janeiro – Brasil
    Informaciones: www.catarata-refrativa.com.br
  • ASCRS-ASOA Symposium & Congress
    Abril 25 – 29, Boston, MA – USA
    Informaciones: www.ascrs.org
  • 29 Congreso de la SECOIR
    Mayo 14 – 17, Alicante – España
    Informaciones: www.secoir.org
  • XXIII Curso Regional Panamericano – PAAO y ASUO
    Mayo 29 – 31, Punta del Este – Uruguay
    Informaciones: www.paaoregional2014.org
  • – XXXII Congress of the ESCRS
    Septiembre 13 – 17, Londres – Inglaterra
    Informaciones: www.escrs.org
  • VII Congreso ALACCSA-R del Hemisferio Sur
    Octubre 02 – 04, Buenos Aires – Argentina
    Informaciones: www.alaccsa-r.com
  • AAO Annual Meeting
    Octubre 18 – 21, Chicago – USA
    Informaciones: www.aao.org
  • Curso del Centro Mexicano de Cirujanos de Catarata
    Octubre 23 y 24, Veracruz – México
    Informaciones: www.cmcc.org.mx

Tecnologías diagnósticas modernas en cirugía de catarata


Coordinador:

Dr. Daniel Badoza – Argentina

Panelistas

Dr. Noé Rivero – Argentina
Dr. Carlos Gómez – República Dominicana


Contacto

Dr. Daniel Badoza – dabadoza@gmail.com Dr. Noé Rivero – noerivero@yahoo.com Dr. Carlos Gómez – cog28@msn.com


1. ¿Qué importancia le da a la medición del grosor del cristalino? ¿Le encuentra utilidad en algún caso en particular?

Dr. Noé Rivero: Lo tomo en cuenta para ojos muy cortos o muy largos ya que el ELP en estos ojos pueden variar. Al utilizar para mis mediciones el equipo GALILEI G4 y G6 me es muy fácil tener el valor real del espesor cristaliniano, y al utilizar la fórmula de PANACEA para mis cálculos, me da un factor adicional de seguridad refractiva en esos ojos. Como sabemos, en fórmulas como Haigis, por ejemplo en ojos cortos y un espesor de cristalino elevado, el tener un ACD bajo, nos calcularía como si fuese un ojo con un segmento muy pequeño y nos va a subestimar el poder de la LIO con el subsiguiente error refractivo.

Dr. Carlos Gómez: Prácticamente todas las fórmulas importantes que utilizo hoy en día la toman como parámetro, de manera que si quiero tener un cálculo más exacto, es importante.

2.¿En la medición del astigmatismo corneal, qué equipos utiliza? ¿Cuál de ellos prefiere en la consideración de los poderes y ejes del mismo?
Dr. Noé Rivero: Utilizo el equipo GALILEI G4 y G6 para la medición del poder y eje del astigmatismo corneal tanto para SimK, poder corneal real anterior y posterior (calculo relación P/A) y poder corneal total por Ray Tracing.

Dr. Carlos Gómez: Pentacam, OPD.

3.¿Utiliza la medición del astigmatismo posterior de la córnea o cree que es suficiente con utilizar fórmulas que lo compensen a partir de la queratometría anterior?

Dr. Noé Rivero: Para ojos normales, fórmulas que compensen el astigmatismo corneal posterior como Barret y Abufallia-Koch no tendrán diferencia significativas en el cálculo de la lente, pero debemos saber que un 15 % de los ojos normales tendrán una relación con la cara posterior fuera de la norma y pueden tener hasta una desviación en el cálculo de hasta 1,5 D, pero en ojos extremos miópicos o hipermetrópicos, queratocono, posquirúrgico LASIK miópico e hipermetrópico superior a 2 D se va a ver que afecta aun más la relación P/A normal de 82,2 % y esa diferencia dióptrica va a ser aun mayor.

El poder tórico o cilindro a corregir, va a depender de algunas variables. Fuera del SIA, el de mayor importancia es el astigmatismo corneal total preoperatorio, que depende de la suma del astigmatismo anterior y posterior de la córnea. Este vector astigmático logra ser predecible tanto en poder como en eje, principalmente en los astigmatismos con la regla, con los diferentes nomogramas, como los de Barret y Abulafia-Koch en un alto porcentaje en forma aceptable, pero en aquellos ojos con astigmatismos elevados de cara anterior, sobre todo si son irregulares, oblicuos o contra la regla, los nomogramas no siempre son aptos, en especial porque no logran predecir en poder altos astigmatismos de la cara posterior y pueden fallar hasta en 10 grados el eje propuesto, pudiendo llevar a errores de hasta 1-1,5 D en la estimación del poder total tórico de la córnea, y del poder del LIO tórico recomendado.

Aunque el utilizar fórmulas que compensen las variables no medidas o que aún no logramos controlar, como adjudicar entre 0,5 y 0,65 D contra la regla a todos los casos, es a modo de ejemplo como cuando colocábamos lentes esféricos de un mismo poder para todos los pacientes. En algunos casos nos aproxima

remos, pero en otros tendre- mos grandes fallas, por estas razones es muy importante medir la cara posterior, tanto la magnitud del poder real y el eje del astigmatismo, y es aquí donde entra en juego el calculador PANACEA que es el único que toma estos datos para el cálculo del lente tórico.

Dr. Carlos Gómez: Creo que es importante tener me- didas precisas, así que utilizo la medida de la cara poste- rior siempre.

4. ¿Cuándo considera que la aberrometría cor- neal es de ayuda?

Dr. Noé Rivero: Si queremos disminuir el error refractivo final y plena satisfacción del paciente en el posquirúrgico, debemos tener en cuenta todas las variables posibles de cálculoyunadeellaseslademedir las aberraciones corneales. Sabemos que una córnea nor

mal es prolata con una asfericidad (Q −0,27 Pentacam o E2 +0,27 GALILEI) y una aberración esférica positiva, la mejor lente que se adaptará es una asférica negativa, pero si tenemos un paciente pos-LASIK hipermetrópico o con queratocono, tendremos una cór- nea hiperprolata con una aberración esférica negativa, y deberemos co- locarle una lente esférica positiva y viceversa. En el LASIK miópico ten- dremos una córnea oblata con una aberración esférica positiva y coloca- ría un lente asférico negativo. Ade- más, tenemos que tener en cuenta las aberraciones de 3er orden como el coma vertical y el trefoil que pueden producir halos y deslumbramiento y las de 5o o 6o orden que podrían estar originadas por alteración de la cali- dad lagrimal, como el ojo seco o las distrofias corneales.

Dr. Carlos Gómez: Siempre, odio las sorpresas refractivas.

5.¿Utiliza algún equipo para me- dir la calidad visual o la visión de contraste?

Dr. Noé Rivero: No de rutina, pero en pacientes con lentes difractivas trifocales como FINEVISION PhysIOL, que es mi len- te de elección en solución de la presbicia, estoy utilizando un programa que mide la curva de desenfoque de las lentes de ma- nera automatizada realizado por Qvision del Dr. Joaquín Fernández y DOO. Manuel Rodrí- guez, es muy sencillo de usar con un iPad, se baja gratuitamente la App y se solicita una clave al grupo de Facebook multifocal lens analizer.

Dr. Carlos Gómez: Actualmente no ten- go disponible en mi oficina un equipo para medir la visión de contraste, hago algunas pruebas de visión con iluminación alterna.

6.¿Qué fórmulas de cálculo utiliza más frecuentemente?

Dr. Noé Rivero: Las fórmulas de cálculo que utilizo más frecuentemente en ojos normales son de 3er generación como Srk-T y Haigis. Pero para ojos extremos, pos-LASIK miópico, hipermetrópicos o as- tigmatismo, posqueratotomía radial y para lentes tóricos y multifocales utilizo la fórmula PANACEA desarrollada por el Dr. David Flikier con excelentes resultados posquirúrgicos, ya que es el único calculador que tiene en cuenta el poder y eje real del astigmatismo posterior corneal real además de otras múltiples variables. Se pue- de bajar gratuitamente desde http://www. panaceaiolandtoriccalculator.com/down- loads.html para Mac, PC y iPad.

Como resumen final de todo lo expuesto, no sirven de nada los datos y las fórmulas co- mentadas si no tenemos una excelentísima calidad de las tomas que realizamos con los equipos que disponemos.

Dr. Carlos Gómez: En este orden, Hai- gis, Panacea, Barrett.

 

Tecnologías diagnósticas modernas en cirugía de catarata


Coordinador

Dr. Fernando Aguilera – México

Panelistas

Dr. Gerardo Valvecchia – Argentina Dr. Guadalupe Cervantes – México Dr. Luis Escaf – Colombia


Contacto

Dr. Fernando Aguilera – drfaguilera@gmail.com
Dr. Gerardo Valvecchia – gerardovalvecchia@hotmail.com

Dr. Guadalupe Cervantes – gpecervantes@hotmail.com Dr. Luis Escaf – escaff@gmail.com

CASO CLÍNICO

Se trata de un paciente masculino de 62 años con antecedentes:• Diabetes tipo II controlada.

• CX catarata OIZQ ─ 2014 «complicada», que ameritó tres operaciones, actualmente en ptisis.
• Ojo derecho AV 20/200 que no mejora con corrección.
• QM43x43,5×175
• Córnea transparente con cuenta endotelial de 2 874.
• Cristalino con opacidad polar posterior avanzada.
• Vítreo transparente.
• Retina sin evidencia clínica de retinopatía diabética.
• OCT macular normal.
PREGUNTAS:

1.¿Qué estudios preoperatorios utilizan en la valoración de estos casos de catarata polar posterior?

Dr. Guadalupe Cervantes:
-Examen oftalmológico completo: biomicroscopía con exploración minuciosa de la cara posterior del cristalino y muy buena revisión de la retina (DM y ojo único).

Cálculo de lente intraocular (incluyendo lente monofocal de una pieza para bolsa y de tres piezas para sulcus).

-UBM (ayudará a diferenciar una opacidad subcapsular posterior vs catarata polar posterior vs lentícono posterior vs hialoides persistentes (“puntos de Mittendorf”) vs vítreo primario hiperplásico persistente).

Dr. Luis Escaf: Estamos al frente de un caso especial de catarata con dos condiciones, aunque independientes entre sí, se entrelazan para ofrecer un panorama que reta aún más al cirujano, como son un ojo único valioso y una catarata polar, que de por sí tiene una alta probabilidad de ruptura capsular posterior (según la literatura, del 7 % al 37 % de RCP), con todas las complicaciones que esto supone.

Es de sospechar que el ojo actualmente en ptisis es producto de una complicación derivada de la cirugía de catarata y que después de tres cirugías [el paciente] terminó con el ojo en esas condiciones de ceguera.

Antes de pasar a considerar el abordaje preoperatorio, es muy importante explicarle al paciente y familiares el riesgo que esta cirugía supone y, por supuesto, el cirujano hacer un autoanálisis y ver si se siente competente para abordar el caso.
Como toda catarata, debe tener su biometría, ecografía, recuento endotelial y OCT macular. Pero nosotros consideramos de gran utilidad en este tipo de cataratas hacer una UBM, que muestre la catarata polar y su relación con la cápsula posterior, ya que es de pocos conocidos que la catarata polar posterior puede presentarse de diferentes formas en relación con la cápsula posterior (Foto

1. Catarata polar posterior por encima de la cápsula posterior (Fig. 2).
2. Catarata polar posterior parcialmente incrustada en el espesor de la cápsula posterior.

3. Catarata polar posterior involucrada 100% en la cápsula posterior, lo que supone, de entrada, que hay un riesgo del 100 % de una RCP.

Esto solo lo podemos ver con una UBM o con IOLMaster 700 (comunicación escrita del Dr. Mario de La Torre -Fotos 3, 4, 5.

(Ver video 1)

Dr. Gerardo Valvecchia: Habitualmente utilizo todos los recursos a mi alcance para así poder dar información adecuada a los pacien- tes de cuál podría ser el desarrollo y desenlace de sus cirugías. En los casos como el que se nos plantea es muy difícil vaticinar qué va a pasar durante la misma.

La lámpara de hendidura sigue siendo, a mi cri- terio, irremplazable. Con una buena dilatación y tiempo es posible tener un panorama de con qué nos encontraremos en el quirófano.

También, en estos casos, trato de realizar UBM además de los estudios que pido en forma ru- tinaria antes de ofrecer la cirugía. Si vemos que la cápsula posterior ya está rota, cambia el planteo quirúrgico.

Mi rutina prequirúrgica consta de: topografía corneal, biometría óptica, microscopía endo- telial, iconografía de retina y OCT de mácu- la y córnea.

Por los datos otorgados, no pareciera en prin- cipio, tener alguna patología agregada más allá de la catarata que amerita pedir otro tipo de estudios.

2.¿Qué técnica quirúrgica es la que usan en estos casos?

Dr. Guadalupe Cervantes:

– Incisiones habituales 2,2 y 1 mm. – Tinción con azul de tripano.

-Capsulorrexis central y circular no mayor de 5 mm (útil para captura del LIO).

  • –  SOLO hidrodelaminación sin rotar el núcleo.
  • –  Emulsificación del epinúcleo lenta y con parámetros bajos, evitando descompre- sión brusca de la CA.
  • –  Aspiración lenta de corteza sin causar trac- ción, dejando al final la parte central, pos- terior del cristalino.
  • –  Implante del LIO en la bolsa o en el sulcus, dependiendo de la presencia o no de RCP.
  • –  Retiro de viscoelástico, dejando el ojo sin excesiva presurización.- Punto de sutura.

Dr. Luis Escaf: La técnica quirúrgica debe ir encaminada a preservar en lo posible la inte- gridad de la cápsula posterior desde principio hasta el final, inclusive en la inserción del LIO, puesto que si no se toman medidas, puede ocu- rrir una RCP.

Hay que diferenciar si la catarata es una sub- capsular posterior o una verdadera catarata polar, y si esta catarata polar es dura o blan- da, ya que la conducta quirúrgica varía según su presentación.

Si definitivamente es una catarata polar posterior dura, como se supone en este caso, por la edad del paciente, me voy limitar a describir como no- sotros abordamos este tipo de cataratas.

Dependiendo de lo que podamos ver en la UBM, la conducta varía al momento de realizar la hi- drodisección, la rotación y la facoemulsificación de fragmentos.

Los pasos iniciales serían, en su orden:

  1. Capsulorrexis no mayor de 5,5 mm con el fin de dejar un reborde capsular amplio en caso de RCP y que podamos implantar el LIO en el sulcus.
  2. No hacer hidrodisección.
  3. Realizar la técnica antibloqueo (Figuras 6, 7, 8) parcial ─descrita por nosotros─, muy ori- ginal y lógica para abordar este tipo de cata- ratas polares, publicada en el libro Cristalino de las Américas (capítulo 106, Manejo mo- derno de la catarata polar posterior), en la cual, después de realizar la CCC, no realiza- mos hidrodisección, sino que usando el ultra- chopper, realizamos un surco de un 30 % a 40 % del grosor de la catarata y unos 3 mm a 4 mm de longitud (sin tocar el borde de la rexis). Después completamos la fractura en la periferia del extremo distal utilizando un prechopper mecánico (Escaf prechopper ─ ASICO ─ Katena-Epsilon) y así completamos la fractura en el extremo de la catarata, con- servando el centro de ella.

Debemos tener en cuenta que la altura de la botella no exceda 60 cm para evitar producir estrés sobre la cápsula posterior que implique una RCP.

4. Seguidamente realizamos la hidrodisección, y el líquido diseca las áreas circundantes de la placa sin comprometer el sitio donde está la adherencia a la cápsula posterior placa polar. Si por UBM hemos identificado que se presentan las situaciones 1 y 2 mencionadas anteriormente, 1) catarata polar posterior por encima de la cápsula posterior, 2) catarata polar posterior parcialmente incrustada en el espesor de la cápsula posterior, procedemos a:
5. Realizar rotación suave de la catarata y realizar surcos con el ultrachoper hasta obtener de 6 a 8 fragmentos con un centro común intacto.
6. Procedemos a facoemulsificar los fragmentos tangencialmente sin tratar de desenclavarlos donde están unidos por el centro, adelgazándolos lo más posible.
Tratar de remover el área distal de un fragmento y por ahí introducir viscoelástico dispersivo con el fin de levantar la placa posterior no adherida a la cápsula y así poder facoemulsificar sin el riesgo de RCP. Recordar que seguimos trabajando con alturas bajas, vacíos bajos y poder torsional bajo.
7. Eliminados los fragmentos, procedemos a aspirar la corteza con la cánula de I/A, procurando no sacar la punta del faco sin que simultáneamente introduzcamos viscoelástico por la paracentesis y evitar la herniación de la cápsula posterior y la fractura de ella.
8. Eliminados los restos corticales, debemos tener mucho cuidado en la inserción del LIO, ya que en este paso se puede producir RCP si no rellenamos el saco con viscoelástico suficiente.
Si lo rellenamos mucho, lo podemos hacer explotar y si lo rellenamos a media, la háptica puede arrastrar el saco y producir una RCP. Tratar

que la háptica sobrepase en el centro de la cápsula posterior cuando entra y se despliegue suavemente, tratar de no ro- tarla y, en lo posible, no retirar el vis- coelástico detrás del LIO.

Si la catarata polar presenta la condi- ción 3 (catarata polar posterior involu- crada 100 % en la cápsula posterior, lo que supone de entrada que hay riesgo del 100 % de una RCP), la técnica es la misma que la anteriormente descrita. Lo único que varía es que no rotamos la catarata, ya que se haría un efec- to de trepanación sobre la cápsula posterior; lo que hacemos es dividir- la in situ con el ultrachopper y posterior- mente ir emulsificando el centro (sin lle- gar a la placa) y posteriormente atacar la periferia.

Cuando se haya adelgazado lo suficien- te, levantamos lo que queda con vis- coelástico y emulsificamos lejos de la placa y de la RCP que se haya produci- do.SihayunafranjadeRCP,queusual- mente es redonda y definida, se puede colocar el LIO en el saco y después am- pliarla (ver video 2).

Dr. Gerardo Valvecchia: Asumo a priori que la cápsula posterior está rota o va a romperse, si tenemos la suer- te de que permanezca intacta bienveni- do sea; pero comienzo la cirugía como si estuviera rota. Algo similar hago con los

pacientes que debo operar de cataratas y están previamente vitrectomizados.

INCISIONES: No varío mi técnica. Dos incisio- nes. Córnea clara de 2,4 mm la principal y 0,75 mm la accesoria.

CAPSULORREXIS: Prefiero que sea un poco más pequeña que la habitual. De 5 mm de diá- metro con microfórceps. En caso de no poder colocar el LIO en el bag, tendría mejor sopor- te para colocarlo en el sulcus, y en caso de ser necesario, facilitaría una eventual captura de la óptica.

HIDRODISECCIÓN: Casi NUNCA. El “casi” es porque en algunos casos realizo miniolas de hi- drodisección que voy controlando y me asegu- ro que no lleguen nunca a tocar la catarata po- lar posterior. Igualmente el concepto que debe quedar en claro es NUNCA realizar hidrodisec- ción en estos casos.

HIDRODELAMINACIÓN: SIEMPRE. Es un paso fundamental y lo realizo muy lentamen- te y sin inyectar grandes volúmenes de líquido.

FACOEMULSIFICACIÓN: De rutina trato de luxar con un Drysdale o Pusher el núcleo a cá- mara anterior con maniobras suaves. Actúo como si la cápsula posterior estuviera rota y prefiero un poco más de edema corneal al día siguiente que tener fragmentos flotando en el vítreo. El mismo proceder realizo en los pacien- tes vitrectomizados. La mayoría de los casos que he operado son facoaspiraciones y de ser núcleos más duros, con los nuevos facoemulsi- ficadores, tampoco se observan grandes cam- bios en el posquirúrgico con respecto a la técni- ca de facoemulsificación endosacular.

ASPIRACIÓN DE CORTEZA: Unimanual y siempre comenzando a aspirar los restos por debajo de la capsulorrexis anterior con el ori- ficio de aspiración visible a nuestros ojos, con cuidado y tratando de no acercarme a la catara- ta polar.

COLOCACIÓN DEL LIO: De preferencia en el bag. Monopieza acrílico hidrofílico o hidrofóbi- co. Si la cápsula posterior está rota, tras realicapsulorrexis posterior y colocación del LIO en el bag. De no tener sustento suficiente, coloco LIO de tres piezas en el sulcus.

3. En caso de RCP, ¿qué manejo quirúrgico realizan?
Dr. Guadalupe Cervantes: Al evidenciar la RCP realizo un taponamiento del vítreo con viscoelástico y emulsifico el material remanente en la cámara anterior. En cuanto a la cápsula posterior rota, intento convertir la ruptura a una capsulorrexis circular continua “posterior”, que me pueda servir para abotonar la óptica del LIO. Además, antes de implantar el LIO, realizo una vitrectomía.

Dr. Luis Escaf: En caso de RCP, hay que tener en cuenta si esta se produce al inicio (hidrodisección), durante la faco, durante la remoción de fragmentos o al implantar el lente intraocular. Según el momento, requiere un abordaje diferente, que va desde una conversión a una extracapsular o la asistencia de un retinólogo.

Dr. Gerardo Valvecchia: Depende del momento de la cirugía en el que esté. Habitualmente, al menos en mi experiencia, constato que está rota luego de haber sacado el núcleo.

De no existir vítreo, puedo intentar aspirar las masas remanentes con I/A pero realizando la misma con la pieza de mano del vitréctomo 23 G sin activar el corte. La irrigación la realizo por punción lateral. Es muy controlable y todo pasa más lento en cámara anterior.

Si el vítreo aparece en la ruptura capsular, realizo vitrectomía por pars plana con trocar valvulado 23 G.

4.¿Qué tipo de LIO implantarían en un caso de RCP?
Dr. Guadalupe Cervantes: Si el tamaño de la ruptura no es tan grande, que me pueda poner en riesgo la luxación del LIO hacia cámara posterior, implanto un LIO de
una pieza en bolsa, con captura de la zona óptica en la capsulorrexis.

En caso que esto no sea posible, implanto un LIO de tres piezas en el sulcus, con captura de la óptica en la capsulorrexis anterior.

Dr. Luis Escaf: De antemano a la cirugía uno debe planear qué tipo de LIO va implantar. Puede ser un multifocal, un monofocal o un tórico, pero tener a la mano un monofocal de tres piezas o de una sola pieza. En caso de que no se pueda implantar el LIO premium, se decide por monofocal y, dependiendo de la RCP, se implanta en sulcus o saco, pudiéndose abotonar ya sea por delante o por detrás de la rexis o, en algunos casos, en la capsulorrexis posterior (ver video de Ike Ahmed).

Dr. Gerardo Valvecchia: Si el bag está indemne, LIO monopieza acrílico hidrofílico o hidrofóbico. En cápsula posterior rota con sostén, coloco el mismo LIO en el bag. Previo capsulorrexis posterior y vitrectomía. En cápsula rota sin sostén, coloco LIO de tres piezas en el sulcus.

5.¿En qué casos de RCP con paso de material cristaliniano a vítreo realizarían vitrectomía posterior vía pars plana?
Dr. Guadalupe Cervantes: Se sabe que la manera en que se hace menor tracción del vítreo durante una vitrectomía es realizándola vía pars plana, (regresando el vítreo “a casa”). Sin embargo, cuando el cirujano de catarata que está realizando la faco no domina esta técnica, se puede realizar dicha vitrectomía vía anterior, intentando siempre usar triamcinolona que ayuda a teñir el vítreo y a evitar dejar bandas de tracción hacia la incisión.

Dr. Luis Escaf: Personalmente pien- so que estas maniobras de vitrectomía vía pars plana deben ser ejecutadas por un re- tinólogo y más aún por tratarse de un ojo valioso ya que es ojo único.

Comentarios y conclusiones:

En nuestro servicio realizamos una recopi- lación de todas las cirugías de cataratas he- chas desde el 2011 hasta el 2014 (4 años) y consolidamos 13.328 videos de los cuales 129 (0,99%) eran cataratas polares posteriores (no publicado). La literatura mundial dice que su prevalencia es de 0,44 %. Posiblemente sobrediagnosticamos estas cataratas, y creo que es cierto, ya que des- de que incluimos la UBM como método diag- nóstico (como lo comenta el Dr. Mario de la Torre), la frecuencia de ellas ha bajado en un número apreciable.

Recomiendo utilizar la UBM o el IOLMaster 700 para apreciar si la polar compromete parcial o totalmente el espesor de la cápsu- la posterior.

Realizando la técnica antibloqueo en todas estas 129 cataratas diagnosticadas en la lámpara de hendidura, el número de RCP fue de cuatro cataratas (3,1 %), muy por debajo de la literatura mundial (del 7 al 36 %).

Se trata de un caso de difícil manejo por ser ojo único y catarata polar dura y que debe ser manejada por un oftalmólogo experto con todo el apoyo tecnológico prequirúrgi- co e intraquirúrgico y soporte de retinólogo.

Por último, el Dr. Vasavada hace una revisión de la literatura sobre el tema, la cual incluyo con fines académicos (Fig. 9).

Dr. Gerardo Valvecchia: En la actua- lidad, cuando necesito hacer vitrectomía du- rante una cirugía de catarata, siempre la realizo por pars plana con trocares valvula- dos 23 G con o sin fragmentos de cristalino en el vítreo. Los cirujanos de segmento an- terior debemos manejar trocares y la pars plana.

Cualquier vitréctomo neumático que trai- ga el equipo de facoemulsificación de más de 1.200 cortes sirve. A todos los facoemul- sificadores se les pueden adaptar piezas de mano de vitréctomos 23 G, solo debemos asesorarnos a cuantos PSI trabaja nuestro equipo para comprar las piezas adecuadas.

La entrada posterior es menos traumáti- ca para el ojo y produce menos movimien- to del humor vítreo, menos surge y menor tracción. El índice de complicaciones vitreo- rretinales es significativamente menor. Los

trabajos publicados muestran menor chan- ce de desprendimiento de retina pseudo- fáquico, glaucoma inflamatorio por restos, uveítis facoanafiláctica, edema macular cistoide y menor índice de bridas vítreas a la incisión. La posibilidad de DR pseudofá- quico es del 9 % cuando se realiza vitrec- tomía por pars plana y entre el 10 al 26 % cuando se realiza por cámara anterior.

La técnica básica consiste en un solo trocar a 3,0 mm del limbo e irrigación con cánula 23 G colocada en la punción lateral en cór- nea clara. Se realiza vitrectomía central ge- nerosa y lentamente nos acercamos desde pars plana a la zona de la ruptura capsular.

Cuanto mayor número de cortes pueda de- sarrollar el vitréctomo, más controlado será todo, pudiéndonos acercar a menos de 1 mm de la cápsula del cristalino sin produ- cir tracciones.

Conclusiones del Caso por el Dr. Fernando Aguilera

La frecuencia de ruptura de cápsula poste- rior en catarata polar varía según la rela- ción de ésta con la cápsula. Esto se pue- de evaluar en el preoperatorio con el uso de OCT y ha sido descrito por tres tipos de ca- tarata polar posterior y su relación con RCP durante la facoemulsificación.

En conclusión, la catarata polar posterior implica un riesgo de ruptura capsular aun con todas las técnicas preventivas antes mencionadas, por lo que siempre debere- mos estar preparados para manejar ade- cuadamente esta probable complicación.

Esto se puede evaluar en el preoperatorio con el uso de OCT y ha sido descrito por Chan Emmy (JCRS) (Imagen 1 y Foto 2) o mediante el uso de Swept Source OCT- IOLMASTER 700 (Foto 3).

¡Gracias a los doctores Cervantes, Escaf y Valvecchia por su excelente participación!

Tecnologías diagnósticas modernas en cirugía de catarata


Dr. Oscar Guerrero Berger
México
Profesor Hospital de la Luz IAP, México / Centro Oftalmológico Mira, México

Dra. Jimena Ceja Martínez
México
Fellow Microcirugía Segmento Anterior, Hos- pital de la Luz IAP, México


Contacto

Dra. Jimena Ceja Martínez – jimena_cm@hotmail.com
Dr. Oscar Guerrero Berger – droscarguerrero@gmail.com

El siglo XXI en la oftalmología se ha caracterizado por desarrollos tecnológicos que han permitido dar mayor eficiencia a diversos procesos, permitiéndoles a los pacientes la oportunidad de cambiar su visión en un solo procedimiento, mejorando paralelamente su calidad de vida.

A la par de la evolución de la tecnología diagnóstica, la vasta distribución global de la información en las redes actuales, permiten que todos, médicos y pacientes, tengan conocimiento de las mejoras en los distintos campos de la oftalmología. Esto lleva al paciente a exigir mejores resultados, y a los oftalmólogos mejores y renovadas prácticas. Por ello, es y seguirá siendo de suma importancia la valoración clínica preoperatoria adecuada que permita establecer diagnósticos correctos y precisar cuál es la tecnología diagnóstica complementaria a utilizar.

De forma sintetizada, la tecnología diagnóstica más reciente en cirugía refractiva la podemos enlistar de la siguiente manera:
BIOMETRÍA / QUERATOMETRÍA

La biometría óptica o interferometría de coherencia parcial utiliza una fuente de luz con coherencia parcial que funciona como un interferómetro de Michelson (Figura 1). Los biómetros ópticos miden de la córnea al EPR, en cambio los biómetros ultrasónicos miden de la córnea a la membrana limitante interna. Los primeros permiten realizar mediciones de no contacto, rápidas y precisas, a diferencia de la biometría ultrasónica.

El IOLMaster® (Zeiss) fue el primer biómetro óptico introducido al mercado en 1999. El IOLMaster 700 es su versión más moderna (Fig. 2 y 3). Entre sus virtudes se enlistan las siguientes:

1. Luz infrarroja de láser diodo de 780 nm.
2. OCT de fuente de barrido que permite la visualización y medición del grosor del cristalino, profundidad de la cámara anterior, alteraciones como inclinación del cristalino, además de la visualización de la fóvea (útil para establecer fijación de la mirada).
3. Queratometría telecéntrica. El método que utiliza este biómetro para medir las queratometrías se basa en analizar un patrón de luz emitido por diodo que es captado por la superficie corneal anterior. Son seis puntos de luz en un área de forma hexagonal de 2,5 mm a un ángulo de 14 grados. Se ha demostrado que las mediciones son repetibles a pesar del entrenamiento del operador.
4. Inclusión de distintas fórmulas biométricas (ej.: fórmulas precisas de Barrett para el cálculo de lentes intraoculares).

El LENSTAR® LS900 (Haag-Streit) es el primer biómetro basado en el principio de reflectometría de baja coherencia óptica, contando con las siguientes características (Fig. 4):

1. Luz de diodo superluminiscente de 820 nm, esto permite que pueda realizar mediciones en cataratas de una densidad mayor.

2. Determina queratometrías en dos círculos de 16 puntos cada uno, el diámetro del círculo interno es de 1,65 mm y el del círculo externo es de 2,3 mm y toma las medidas de seis puntos. Es precisamente este método dual zone lo que hace que las mediciones queratométricas obtenidas por este biómetro sean altamente precisas.

3. Nueve mediciones en una sola toma: paquimetría, queratometría, diámetro pupilar, excentricidad del eje visual, distancia blanco-blanco, profundidad de la cámara anterior, espesor del cristalino, longitud axial, grosor retiniano.
4. Inclusión del método Hill-RBF y las fórmulas de Barrett y Olsen.

El biómetro OA-2000 (Tomey), utiliza una tomografía de coherencia de fuente de barrido o espectral, que permite una mayor penetración a los tejidos (Fig. 5):

1. Láser con una longitud de onda de 1 060 nm.
2. Establece un punto de menor densidad de la catarata para así poder realizar la medición.
3. Mide la longitud axial, profundidad de cámara anterior, grosor corneal central, y grosor del cristalino.
4. La superficie corneal es medida por medio de una topografía de discos de Plácido de nueve anillos con 256 puntos de referencia en una sola medición.
5. Puede ser conectado a una unidad de ultrasonido en caso de que se requiera realizar mediciones en ojos con cataratas de mayor densidad u otro tipo de opacidad de medios.

El Pentacam® XL (Oculus) es un sistema conformado por una videocámara de Scheimpflug y un interferómetro óptico (Fig. 6):

1. Su videocámara rota 180° alrededor de un punto de fijación. Brinda entre 25 y 50 imágenes con 500 puntos de elevación en menos de 2 segundos, esto permite tener una imagen 3D del segmento anterior.

  1. Proporciona mapas de elevación anterior y posterior, paquimetría, medidas biométricas del segmento anterior y el poder corneal an- terior y posterior, derivando el poder total cor- neal y el EKR, útiles en el cálculo de lente in- traocular en pacientes que han sido sometidos a cirugía refractiva.
  2. Integra análisis multifórmulas, entre ellas Pot- vin-Shammas-Hill.

El Aladdin HW 3.0 (Topcon) es un sistema confor- mado por un interferómetro de baja coherencia en conjunto con un topógrafo con anillos de Plá- cido (Fig. 7):

  1. Análisis queratométrico en tres zonas (3,5 y 7 mm) con 24 anillos de Plácido en su análisis.
  2. Pupilometría dinámica y análisis aberrométrico.
  3. Mide la longitud axial, profundidad de cámara an- terior, grosor corneal central y grosor del cristalino.
  4. Incluye análisis multifórmula, entre ellos la de Camellin-Calossi, Barret y Abulafia-Koch.

El AL-Scan (NIDEK) es un biómetro óptico asociado a una cámara de Scheimpflug (Fig. 8):

  1. Mide LA, ACD, diámetro pupilar, paquimetría, queratometría en 10 segundos (gracias a un au- totracking 3D efectivo).
  2. Penetra en cataratas densas, ajustando el ratio signal to noise, para amplificar la señal. En ca- sos de cataratas muy opacas se le puede adap- tar un US.
  3. Incorpora análisis multifórmulas, entre ellas Ca- mellin-Calossi, Shammas PL, entre otras.

ABERROMETRÍA

Un frente de onda es la propagación física de un rayo de luz, y las aberraciones son distorsiones de estas ondas visuales causadas por irregularidades

del mecanismo óptico. La luz diverge de su frente de onda ideal conforme pasa las irregularidades de algunos ojos, dando como re- sultado la desviación de un ángulo.

Las aberraciones se pueden dividir en bajo y alto orden.

  • Las aberraciones de bajo orden serefieren a errores refractivos esféricos y cilíndricos que pueden ser corregidos con lentes aéreos o lentes de contacto.
  • Las aberraciones de alto orden son aberraciones que alteran la agudeza visual después de la corrección esférica y ci- líndrica, y en esta se incluyen el trébol y coma.La aberrometría basada en el principio de trazado de rayos usa un rayo láser paralelo a la línea de visión a través de la pupila, mi- diendo la ubicación del mismo al reflejarse en la retina, siendo captada posteriormente por sensores lineales.

    El sistema iTraceTM (Tracey) usa el sistema de trazado de rayos (Fig. 9).

  1. Utiliza una serie secuencial de rayos infrarrojos de 100 micrones y una longitud de onda de 785 nm. Cada uno de los ra- yos es proyectado a la pupila paralelo al eje visual.
  2. El proceso requiere de una proyección de 64 puntos de láser en cuatro ocasiones (256 puntos). Si el ojo fuera emétrope, todos los 256 puntos se concentrarían en el mismo punto en el centro de la mácula.

Existen algunos sistemas que pueden medir aberrometrías de manera intraoperatoria y que pueden ayudar a la toma de decisión de la potencia de lente intraocular a implantar, como lo son el sistema ORATM (Alcon) y el sistema HOLOS IntraOpTM (Clarity).

El sistema ORA (Fig. 10) está basado en la interferometría de Talbot-Moire:

  1. El frente de onda óptico del dispositivo pasa a través de un par de rejillas y su difracción produce un patrón se- cundario. El análisis da como resulta- do una estimación de la potencia del lente intraocular.
  2. Realiza la medición posterior a la extracción de la catarata, aunque es capaz de refractar al ojo en estado fáquico, afáquico o pseudofáquico en cualquier momento de la cirugía.
  3. Se ha visto en varios estudios que los pacientes en los que fue utilizado el sis- tema durante la cirugía tienen mejores resultados visuales, especialmente en los pacientes a los que se le implantan lentes tóricas y premium.
  4. Con respecto a las lentes tóricas, el sistema ORA sugiere poder y posición de la lente.

El sistema HOLOS utiliza un espejo de sistema microelectromecánico de rotación rápida y un detector cuádruple (Fig. 11):

  1. Mide la magnitud del desplazamiento del frente de onda.
  2. Toma hasta 90 mediciones por segundo.
  3. Tiene un rango de medición de -5 D a +16 D.

Los dos sistemas intraoperatorios se conectan al microscopio quirúrgico para co- modidad del cirujano.

En conclusión, el desarrollo continuo y las mejoras de la tecnología en cirugía refractiva deben incentivar a que el médico co- nozca y analice los beneficios de éstas, a la par de conocer sus limitaciones, entendiendo siempre que el estudio clínico del paciente es la guía primaria para el correc- to uso y buen actuar en cada paciente.

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Astigmatismo y cirugía de cataratas

posted by adminalaccsa 6 febrero, 2018 0 comments
Omar López Mato

Astigmatismo y cirugía de cataratas


Dr. Omar López Mato

Argentina


Contacto

Dr. Omar López Mato – omarlopezmato@gmail.com

La palabra más “marketinera” que tiene nuestra especialidad no se la debemos a un colega ni a algún maestro de la medicina grecorromana, sino a un astrónomo llamado Sir George Biddell Airy (1801 – 1892), quien describió este fenómeno óptico al diseñar telescopios. No fue él quien acuñó el término astigmatismo, sino William Whewell (1794 – 1866), teólogo, filósofo y científico británico.
La mayor parte de nuestros pacientes no recuerdan si padecen miopía o hipermetropía, pero seguro saben que tienen astigmatismo, por más que este se encuentre dentro de los límites fisiológicos. De allí que al paciente que operamos de catarata seguramente le interese qué vamos a hacer nosotros con su astigmatismo. ¿Y qué podemos hacer? Esto es una guía personal de cómo manejarlos.
En primer lugar, astigmatismos menores a una dioptría (que son la enorme mayoría) pueden tratarse ubicando la incisión en el eje más curvo (Fig.1).
El problema de esta técnica es que habrá posiciones en las que la cirugía nos resultará incómoda.
Para la corrección de estos astigmatismos menores, contamos con las incisiones corneales. Estas pueden ser:
A)Limbares (en cuyo caso corrigen hasta 1,0/1,5 dioptrías).
B) Corneales, únicas o dobles (que pueden llegar a compensar hasta 3 di

optrías en caso de actuar sinérgicamente con la incisión principal –si ambas están en el eje más curvo (Fig. 2), o en pareja, si deseamos corregirlas en otro eje–(Fig. 3). La distancia entre las incisiones y el limbo estará acorde a las dioptrías que se deseen corregir según el nomograma al que esté habituado el cirujano.

C) También se las puede utilizar en forma vectorial para compensar el astigma- tismo inducido (Fig. 4). Por ejemplo, si el eje más curvo en el OD está a 45o y nosotros hacemos nuestra vía de en- trada a 135o para operar con más co- modidad, calculamos que esta incisión puede inducir hasta 1 dioptría más a las que ya tenía en el meridiano con- trapuesto (en este caso, a 45o). Si queremos compensar tal astigmatismo inducido, podremos colocar una (Fig. 5) o dos incisiones corneales (Fig. 6) en el eje más corto para intentar cor- regir hasta 3 dioptrías. Estas incisiones pueden hacerse con bisturí de diamante o programarse con el femtosegundo. Esta última posibilidad gana adeptos gracias a su precisión y comodidad.

Para astigmatismo entre 1 y 7 dioptrías también se pueden usar las lentes tóricas, que son indispensables si se planea corregir más de 3 dioptrías. En los valores menores de 3 dioptrías, la elección dependerá del gusto del cirujano y las posibilidades del paciente, pues el costo de las lentes tóricas aumenta significativamente el valor de la cirugía.

Cuando las lentes tóricas son colocadas en el eje correcto, y si no se rotan, son más precisas que las incisiones arcuatas, aunque la ubicación de las lentes tóricas requiera más precisión en la detección del eje que durante la cirugía incisional.

El uso de instrumentos como el Verion, permite obtener esta precisión para la determinación de los ejes del astigmatismo durante el acto quirúrgico a fin de compensar la ciclotorsión por el cambio entre la posición vertical y horizontal.

Existe la posibilidad de dejar la corrección del astigmatismo para un segundo tiempo, realizándolo con láser excimer. Se puede considerar hacer el flap al mismo tiempo que la cirugía de catarata a fin de estar listo para levantar la tapa días después, cuando se considere que el astigmatismo está estable. Este método es más exacto, pero implica los riesgos de dos intervenciones y la posibilidad del crecimiento epitelial en la entrecara. Si se desea hacer un LASIK poscirugía de catarata se deben esperar por lo menos seis semanas. Si se decide hacer PRK/LASEK, esta se hará cuando se considere que el astigmatismo está estable.
Por último, algunos casos de astigmatismo irregulares se podrán compensar con anillos intracorneales. Agotadas las instancias, solo nos queda la queratoplastia como última opción.

Para terminar, vale la pena recordar que el concepto de astigmatismo se lo debemos a un astrónomo y a un teólogo, que además fue el primero en usar el término “científico” en lugar de “filósofo natural”. Whewell también fue el creador del concepto de “diseño inteligente” para explicar el orden establecido en la naturaleza, sin advertir que el astigmatismo y la presbicia son algunas características del funcionamiento ocular que demuestran que tal diseño, no fue tan feliz. Afortunadamente hoy podemos corregir estos defectos con cirugías concebidas para enmendar los errores del diseñador tan poco inteligente.

Corrección de astigmatismo en cirugía de catarata


Coordinador

Dr. José Miguel Varas Ecuador

Panelistas

Dr. Daniel Badoza – Argentina Dr. Fernando Aguilera – México


Contacto

Dr. José Miguel Varas – jm@varas.com
Dr. Daniel Badoza – dabadoza@gmail.com
Dr. Fernando Aguilera – drfaguilera@gmail.com

1.Tras examinar un paciente para una cirugía de catarata, ¿le menciona sobre la indicación de la toricidad o simplemente escoge el lente tras hacer un cálculo?

Explicación de la pregunta 1: aunque varios de los biómetros nuevos incluyen cálculos para la toricidad, en ocasiones las queratometrías podrían ser poco confiables a pesar de varios intentos. En esos casos podría necesitarse hacer uso de calculadores externos. Y a que eso podría entorpecer el flujo de la consulta y requiere de más tiempo, la indicación de la toricidad habitualmente urge al departamento de presupuestos explicar un monto o recargo al paciente.

Dr. Daniel Badoza: A todos los pacientes con catarata les explico que existen LIO tóricas para la corrección del astigmatismo corneal. Si la queratometría muestra un astigmatismo mayor que 1 dioptría, le indico LIO tórica durante mi consulta y el paciente se lleva el presupuesto por la monofocal tórica o la trifocal tórica en caso de que sea una opción válida para su caso.

Como el cálculo de cada LIO generalmente lo realizo 2 o 3 días antes de la operación usando Barrett Toric Calculator, cuando el astigmatismo es menor que 1 (donde la influencia del astigmatismo da hacia la cara posterior y la incisión pueden llevarnos a una LIO T0 o T2), le hago dar los presupuestos de las dos opciones de óptica, haciéndole saber que en la mañana previa al día de la operación las secretarias lo contactarán para confirmarle cuál de los dos tipos de lentes es el preferido.
Gracias a mi explicación previa, los pacientes aceptan la diferencia de precio entre ambas tecnologías y consienten el implante tórico.

Dr. Fernando Aguilera: Si el paciente tiene catarata con astigmatismo se le informa sobre ello y se le muestran videos animados (Eyemaginations) sobre catarata, astigmatismo y LIO tórico. Una vez hecho esto, se determina si está interesado en tratarlo mediante lente tórico. Si el paciente no está interesado, fin de la discusión. Si está interesado, además de la biometría y Pentacam que hacemos de rutina en todo preoperatorio de catarata, se realizan estudios complementarios por una técnica médica el mismo día de la consulta.

2.Al considerar la queratometría para calcular un lente tórico, ¿por qué prefiere un dispositivo sobre otros?, ¿usa varios?, ¿hace un promedio de varias queratometrías o qué método usa?

Dr. Daniel Badoza: Al ingresar los datos queratométricos, comparo los resultados del IOLMaster, el queratómetro automático, el Orbscan y a veces también uso el Verion. Generalmente ingreso el eje más curvo de los 3 mm centrales que brinda el Orbscan, calculando el eje más plano según ese resultado. En cuanto al poder del cilindro, suelo guiarme por el IOLMaster, salvo que los otros métodos sean más concordantes entre sí.
Cuando los valores son muy disímiles entre medidas distintas de un mismo equipo o de varios y el paciente tiene sequedad ocular (en especial cuando es secundaria a trastor-

nos palpebrales), atraso la operación hasta mejorar la misma con el tratamiento específico. En caso de astigmatismo menor que 0,50 D con ejes muy disímiles, decido el implante de LIO no tórica.

Dr. Fernando Aguilera: Para cálculo de LIO tórico es indispensable cuantificar el poder y el eje queratométrico. Para determinar este valor, además de autoqueratometría, realizamos topografía con Pentacam, Galilei, Atlas y OPD-Scan. Valoramos regularidad, simetría y ortogonalidad. Aplicamos los valores encontrados en diversas fórmulas y comparamos los cálculos obtenidos. Utilizo principalmente fórmula Barrett Toric Calculator V2.0 del sitio APACRS.org ingresando los valores de 3 diferentes equipos y utilizando el modo de “K calculator”, que da el valor final queratométrico utilizado por esta fórmula.

Actualmente estamos utilizando la fórmula Panacea. Lo importante no es medir por medir, sino saber determinar qué medición es la adecuada para ingresar en los diferentes calculadores, lo cual puede ser algo confuso y complejo. Además, el

calculador utilizado deberá tomar en cuenta el ELP del LIO, ya que depen- derá de la posición efectiva del LIO, la cantidad de astigmatismo real que corregirá la toricidad del LIO a nivel del plano corneal.

3.Si tiene el historial refractivo de su paciente o logra hacer una refracción confiable y co- herente, ¿usa el astigmatismo refractivo, hace una diferencia vectorial o no lo considera?

Dr. Daniel Badoza: Si tengo un historial refractivo del paciente lo considero como una confirmación más del astigmatismo, en especial en cuanto al eje, pero siempre en mis cálculos uso valores queratométricos.

Dr. Fernando Aguilera: No toma- mos en cuenta la refracción previa, ya que no hay garantía absoluta de que no ha sido influenciada por la opacidad del cristalino, aunque el poder y el eje refractivo concuerden con los datos que obtenemos con ARK y topografías.

4. Después del último control posoperato- rio, si el resultado resulta satisfactorio o dentro de las expectativas, ¿observa la diferencia ente la orientación planeada y la lograda de la lente tórica?

Dr. Daniel Badoza: Cuando los resultados son los esperados, siempre mido y registro en la historia clínica la orientación obtenida y la comparo con la planeada entre el primer mes y el tercero posoperatorio. No evalúo la orientación de la LIO para evitar los efectos sobre el epitelio corneal que suelen provocar las gotas midriáticas en los ojos recién operados. De esta forma, hay mejores condiciones para una rápi- da recuperación de la calidad visual. Dilatar la pupila “para comprobar que todo esté bien con la lente” podría generar en el paciente un efec- to psicológico contraproducente de que “algo podría estar mal”. Sólo cuando el resultado re- fractivo no me satisface al primer o segundo día posoperatorio, observo al paciente con la pupila dilatada.

Dr. Fernando Aguilera: Siempre realizamos al mes posoperatorio de estudio bajo mi- driasis de OPD-Scan, para valorar WF interno y determinar el eje preciso del LIO tórico implan- tado. En caso de haber un residual astigmático determinamos cómo corregirlo. Utilizamos el si- tio Astigmatismfix.com para decidir si habría que rotar el LIO, cambiarlo o realizar cirugía corneal.

5.Después del último control posoperatorio hace un cálculo del error tórico, es decir calcula la diferencia vectorial entre resultado y planeado? De hacer- lo, ¿cómo lo hace?

Dr. Daniel Badoza: Generalmente sólo mido la diferencia que hay entre el eje planeado y obtenido, para evaluar mi praxis quirúrgica. En casi todos mis casos, dicha diferencia no supera los 4 grados. Más allá de la repetida regla “1 grado de error equivale al 3 % de pérdida del efecto tórico de la lente”, en esos niveles de error no encuentro en mis pacientes defectos astigmáticos residuales que tengan importancia clínica que justifique mayor análisis.

Dr. Fernando Aguilera: Regularmente no realizamos análisis vectorial final.

6. Además de las lentes tóricas, ¿qué otra estrategia preoperatoria usa para con- trarrestar el astigmatismo?

Dr. Daniel Badoza: Siempre intento corregir el total del astigmatismo corneal con la LIO tórica. Si el calculador me sugiere un T2, general- mente es lo que implanto. La LIO tórica es el mé- todo más preciso, confiable porque no depende de la cicatrización y que menos efectos adversos genera al corregir el astigmatismo en pacientes en los que vayamos a hacer facoemulsificación. Entonces, ¿para qué planear otro preoperato- riamente?

En pocas ocasiones que detallo más abajo planifico la ubicación de la incisión para ayudar a corregir el astigmatismo. No hago otro tipo de plan preoperatorio.

Soy zurdo y me siento cómodo operando por el costado, no me siento a la cabecera del pacien- te. Por eso casi siempre mi herida en OD es a 135° y en OI sentándome oblicuo es a 0o.

A veces hago excepciones a la regla:

  1. En ojos derechos me puedo ir algo más hacia los 90° o 100°, si ayuda a bajar astigmatismo a favor de la regla en miopes altos en los que deba implantar LIO no tóricas de bajas diop- trías a través de incisión de 3-3,2 mm.
  2. En ojos izquierdos, generalmente me siento diagonal para que mi incisión quede a 0o, pero puedo correrme en el arco de 45° o a 135° en

astigmatismos bajos en los que esa modificación me permita bajar de T2 a no tórica, para hacer más sencilla la operación y ha- cerle ahorrar dinero al paciente. Lo mismo hago en pacientes con altos astigmatismos donde un T9 no llega a corregir.

Dejo las cirugías queratorrefracti- vas sólo para retocar un paciente en los que a pesar de seguir las in- dicaciones del calculador, está in- satisfecho por un defecto residual. Generalmente LASIK o PRK, aun- que si quedara un astigmatismo mixto me plantearía hacer arcua- tas o LRI.

Dr. Fernando Aguilera: Las maniobras alternativas para ma- nejo de astigmatismo, además del LIO tórico, son las incisiones ar- queadas límbicas cuando el astig- matismo es menor de 0,75 D, sobre todo cuando es VS la regla, y la localización de la incisión princi- pal sobre el eje más curvo; aunque estas dos últimas estrategias no siempre dan resultados exactos, además de ocasionar HOA y tener regresión del efecto.

Es indispensable saber el astig- matismo inducido quirúrgicamen- te (SIA) que ocasionamos según la localización de nuestra incisión principal. Actualmente, con medi- ciones exactas de curvatura cor- neal anterior y (no tan exactas) de posterior, TCRP, TRP y calculadores vectoriales de última generación, es posible tratar astigmatismos corneales bajos y altos en forma más efectiva que hace unos años, aunque definitivamente falta afinar el cálculo de LIO tórico aún más.

Corrección del astigmatismo en cirugía de cataratas


Coordinador:

Dr. David Flikier – Costa Rica

Panelistas

Dr. Pablo Suárez – Ecuador Dr. Noé Rivero – Argentina


Presentación del caso

Paciente femenina de 70 años, quien es referida por otro oftalmólogo para valorar y realizar nueva queratoplastia penetrante.
Antecedentes de queratocono, con queratoplastias penetrantes del ojo derecho en dos ocasiones (1 hace 45 años y 2 hace 20 años) y del ojo izquierdo en una ocasión hace 25 años.

Antecedente de hidrops en el injerto corneal del ojo derecho un año antes de la consulta, y resolución con tratamiento tópico.
Usuaria de lentes de contacto esclerales, con los cuales logra agudezas visuales de 20/50 OD y 20/30 OI, pero refiere gran intolerancia a los lentes de contacto y le gustaría no tener que utilizarlos si fuera posible.

Examen optométrico:
OD AVSC CD 1 m, AVCC 20/60 -11.00 (-6,00 x 69)
OS AVSC 20/200-, AVCC 20/30+ -5.00 (-6,00 x 135)

Al examen presenta una ectasia de tipo queratoglobo, con un marcado adelgazamiento de la córnea receptora, hasta el limbo en 360 grados en ambos ojos. En ojo derecho existe una opacidad estromal temporal en el sitio del hidrops previo. Cámara anterior muy amplia. Esclerosis nuclear moderada del cristalino. Resto del examen sin datos de importancia.

Se presentan exámenes complementarios. Pentacam, Biometría con LENSTAR, TCO de segmento anterior, microscopía especular.

Preguntas del caso

1.¿Consideraría realizar algún procedimiento corneal? De considerarla, ¿en cuál ojo? Por otro lado, ¿Preferiría intentar mejorar la agudeza visual inicialmente con una cirugía de catarata y lente tórico?

Dr. Pablo Suárez: ¿La agudeza visual es mala por el defecto corneal? O ¿qué impacto tiene la catarata en este caso? Procedimiento corneal:

1. En la imagen de TCO corneal de OD se puede evidenciar un desprendimiento de la membrana de Descemet en una gran zona de la córnea. Esta lesión puede ser la causa de esa opacidad que describe el Dr. Flickier. Para corregir este defecto:

  1. Queratoplastia penetrante.
  2. En caso de no tener disponibilidad de tejido, se puede colocar una burbuja de gas en cámara ante- rior para corregir el defecto de la membrana de Descemet, teniendo en cuenta de usar dilatadores pu- pilares como epinefrina o atropina para evitar un bloqueo pupilar.
  3. La cirugía de facoemulsificación, en caso de realizarla luego de una queratoplastia, creo que tendría mejor resultado refractivo y lógica ya que el poder de la lente sería diferente por varios motivos.i. Cambio en la profundidad de cámara anterior.

    ii. Cambio de curvaturas.
    iii. Cambio en la longitud axial.

Dr. Noé Rivero: No me parece lo más acertado realizar un procedimien- to corneal en este paciente, ya que el lecho receptor delgado y vasculariza- do implica un fracaso inminente en una nueva queratoplastia. Además, en los estudios se evidencia que el OD tiene una paquimetría de un poco más de 600 micras, lo que no habla bien de la sa- lud de ese endotelio. El OI presenta una irregularidad severa, pero con una sa- lud corneal más evidente.

La cirugía de catarata es la opción más conveniente en este caso, pero la colo- cación de una lente tórica en tal asime- tría corneal no estará indicada.

2. Si realizara una faco, ¿qué cam- bios haría en la técnica usual en este caso específico?

Dr. Pablo Suárez: Facoemulsificación:

  1. El uso o abuso de OVD en este caso sería la primera consideración, puesto que el contaje de células está alterado.
  2. Tratar de trabajar con el punto de faco en nivel de pupila o bolsa ya que el US puede afectar a ese contaje celular.
  3. No dejar que la catarata aumente su madurez, ya que eso incrementaría el uso de US y vacíos. Por ello, es una catarata que debe ser operada con pa- rámetros conservadores y bajos.
  4. Realizaría herida limbal no corneal, para no descompensar más la forma de la córnea.
  5. Al realizar un túnel limbo-escleral para la cirugía hace también que la neovascula- rización no ingrese por una herida a la córnea, pudiendo ocasionar una epiteli- zación de la cara posterior de la córnea.

Dr. Noé Rivero: La respuesta es sí, rea- lizaría incisión escleral a 1,5 mm del lim- bo para no tocar y modificar la estructu- ra corneal, ya que se encuentra muy fina e inestable. En la mesa quirúrgica no esca- timaría con los viscoelásticos, ya que ne- cesitamos realizar una protección endo- telial con viscoelásticos dispersivos para cubrir el endotelio y viscoelásticos cohe- sivos, para mantener la cámara formada. Así, realizaré una faco en slow motion y sin apuro con bajo US y trabajando en bag capsular, como me enseñó en la residencia mi profesor Gustavo Schlaien.

3.Si colocara una lente intraocular, ¿cómo calcula el poder de la LIO?

Dr. Pablo Suárez: No estaría de acuerdo en realizar un procedimiento mixto de quera- toplastia (KPP) más faco, por lo que esperaría una estabilidad corneal para proceder. Esto me ayudaría a que el cálculo sea más fácil.

Dr. Noé Rivero: Sí, colocaría una lente monofocal esférica de tres piezas en bag capsular y calcu- laría con fórmulas de última gene- ración como Barrett II, Panacea y W-Hill. Tomando el poder refractivo total corneal en los 3 mm centrales con Pentacam o Galilei, ya que por la irregularidad corneal severa es prácticamente imposible calcular una lente solamente con cara ante- rior corneal, como dan los equipos de cálculo LENSTAR e IOLMaster.

4. ¿Cuál sería su LIO preferido? Si fuese tórico, ¿cuál método utilizaría para calcularlo? O ¿preferiría una LIO esférica y continuar con el uso de una lente de contacto escleral?

Dr. Pablo Suárez: ¿Por qué una lente asférica?

REFRACCIÓN
OD: -6,00 @ 69 OS: -6,00 @ 135

IOLMaster
0D: 3,83 @ 143 OS: 5,75 @ 52

Pentacam
OD: 14,1 @ 86,4 OS: 19,3 @ 121,4

Los datos que tenemos del astig- matismo son completamente dife- rentes entre cada plataforma por lo que no sería recomendable una lente tórica.

En algunas ocasiones (no en mu- chos casos), pero con córneas muy diferentes que las de este caso, se puede colocar lente tórica en el eje y poder sugerido de la refracción. Se han conseguido buenos resulta- dos en algunos de ellos, pero este caso es muy extremo para ello.

Lente tórica luego de tener una queratoplastia estable, sí puede ser una muy buena idea.

Dr. Noé Rivero: Colocaría len- te de tres piezas esférica acrílica hi- drofóbica (ALCON MA60MA) de 13

mm diámetro total con una óptica de 6 mm ya que me daría la estabilidad nece- saria para este caso.

Y para resolver las aberraciones quera- tométricas de este paciente, encuentro como única solución utilizar un lente adi- cional en sulcus ciliar, como en el pinhole (XtraFocus) desarrollada por el Dr. Trin- dade de Belo Horizonte, Brasil.

La lente es una monopieza acrílica hidro- fóbica negra, 100% transparente a rayos infrarrojos que nos permite evaluar las estructuras posteriores a la lente, de 14 mm de diámetro total, con un orificio de 1,3 mm central, que a través del efecto pinhole, que todos conocemos, permite disminuir el efecto de confusión de la re- tina, mejorando el foco en corneas tan asimétricas como las del caso presenta- do. La experiencia en casos bilaterales en la bibliografía no demuestra pérdida importante del campo visual ni oscureci- miento significativo.

5.Algún comentario adicional con respecto al caso.

Dr. Pablo Suárez: Hemos visto en los últimos congresos donde el Dr. César Carriazo y la Dra. María José Cosentino realizan cuñas periféricas para estabilidad corneal en caso de ectasias. Sería interesante escucharlos si lo harían en este caso.

Dr. Noé Rivero: El caso hubiera sido distinto si los injertos previos se hubieran realizado con un botón donante más grande, como recomendaba el Dr. Enrique Malbran, ya que al tratarse de una enfermedad degenerativa y progre- siva como es el queratocono, el lecho receptor no nos permite un nuevo tratamiento corneal.

Resolución del caso

Debido al marcado adelgazamiento pe- riférico en ambos ojos en 360 grados, se consideró que una cirugía de que- ratoplastia sería técnicamente difícil y de mal pronóstico. El espesor corneal aseguraba hasta cierto punto la función endotelial. Al ver los cortes de la TCO y del Pentacam, el disco corneal trasplan- tado parecía relativamente plano, ante la gran ectasia periférica.

Existía catarata moderada, que podría explicar en parte la baja visión. Enten- diéndose que el astigmatismo del ojo derecho era asimétrico con un coma importante, pero el del ojo izquierdo, al menos en los 3-4 mm centrales, parecía regular y simétrico.

Se tomó la decisión de someter a la paciente a una cirugía de faco, colo- cándose una lente monofocal no tórica (MA60MA 0.00 D) en el ojo derecho, suponiéndose que quedaría un astig- matismo irregular que requeriría de una lente de contacto, y una LIO tórica en el izquierdo (AT TORBI 709M +2,00 CYL +9,0), esperando corregir gran parte del defecto tórico (tomando en cuenta la toricidad de la cara posterior).

Sorprendentemente, y por lo que trae- mos el presente caso, desde el poso- peratorio inmediato la paciente refiere estar viendo como nunca lo ha hecho en su vida, logrando tener multifocalidad con visiones lejanas y cercanas exce- lentes, que sobrepasaron lo esperado.

Se adjuntan fotos del subjetivo y au- torefractómetro posoperatorio, con vi- siones corregidas de 20/25 OD -0,25 (-1,00 x 70), y 20/20-1 OI Neutro. J1 a 20 cm.

Conclusiones:

Existe la buena fortuna.

Debemos buscar siempre el procedimiento que tenga la menor posibilidad de compli- caciones y que pueda otorgarle al paciente la mayor posibilidad de éxito.

Corrección del astigmatismo en cirugía de catarata


Dra. Ximena Núñez

Colombia


Contacto

Dra. Ximena Núñez – ximena@visionsana.com

Comencemos el tema dando un orden armónico, hablando de la catarata, que pese a los esfuerzos globales como es el Plan Visión 20/20 de la OMS, llamado «El derecho a la visión», la catarata es uno de los principales focos a tratar. El número anual de cirugías necesarias para eliminar la ceguera por catarata se estima entre 2000 y 4000 cirugías por millón de habitantes, de acuerdo con la región. Sin embargo, se encuentran diversos factores que contribuyen a no alcanzar el número de cirugías requeridas, como son las dificultades económicas, culturales y no menos importante, el desconocimiento del tratamiento quirúrgico. Esto finalmente repercute en no poder disminuir la ceguera y tener centenares de pacientes con baja visión por catarata.

Siendo así, desde el punto de vista de salud pública, la catarata hay que operarla y a pesar de los intentos de modernización, no se ha podido superar aún su clasificación con el LOCS III, ni su tratamiento electivo con facoemulsificación y sin establecerse el procedimiento como una cirugía refractiva, concepto moderno cuyas expectativas van más allá de prevenir la ceguera.

Entonces cuando hablamos de astigmatismo en pacientes con catarata extendemos el concepto básico de la diferencia entre curvaturas corneales. Aquí estamos pensando en optimizar un resultado y, más importante aún, en resaltar el hecho de que aproximadamente el 40 % de los pacientes con catarata presentan astigmatismo superior a 1 dioptría1, y que en pacientes pseudofáquicos, astigmatismos residuales superiores a 0,75 D disminuyen la agudeza visual y deterioran la calidad de vida, principalmente si el implante fue con un lente multifocal, trifocal o de visión extendida. Estos pacientes pueden referir síntomas como visión borrosa, glare, halos, fotofobia y diplopía2.

Con este preámbulo, para los pacientes que además de la Facoemusificación esencial buscan una solución refractiva definitiva, podríamos pensar que antes de tener la multifocalidad en nuestra mente, se debe evaluar la curvatura, y después decidir el lente a implantar. Solo hago referencia a este aspecto porque es el tema que nos ocupa, pero no debemos olvidar otros tantos como la película lagrimal, el nervio óptico y la mácula. Estos requisitos implican que se requiere un manejo personalizado para cada paciente y que lo premium no son los lentes, sino el análisis y la decisión correcta para cada caso.

Existen diferentes formas de corregir el astigmatismo en cirugía de catarata, como son: la incisión en el meridiano curvo, las incisiones pareadas, las incisiones corneales relajantes y los lentes tóricos. Cada uno de estos métodos tiene distintas aplicaciones, límites y predictibilidad en los resultados, lo que implica que cada cirujano está en la obligación de conocer hasta adónde se puede llegar con cada corrección.

La evaluación de la curvatura y la búsqueda de la toricidad implican que debemos tener, como mínimo, una tomografía y una biometría óptica, evaluar la superficie corneal anterior y posterior y usar los calculadores tóricos alimentando la información adecuadamente. Si el astigmatismo es regular (imagen 1) y el paciente tiene una fijación adecuada, no tendremos mayor problema en el cálculo del lente; pero cuando el astigmatismo es irregular (imagen 2) esto requiere un mayor conocimiento, y aquí es imperativo salirse de la rutina básica y acudir a la experiencia y el juicio razonable.

El uso de los calculadores tóricos deberíamos adoptarlo de rutina, con un SIA personalizado, y en todos los pacientes. Con sorpresa a veces pensamos que un caso es para colocación de un lente tórico y no lo es, o por el contrario, no lo consideramos, y el calculador nos presenta un lente tórico como lo más adecuado para el paciente.

El lente tórico es la opción que ofrece la mejor predictabilidad en la correción de astigmatismo en pacientes que presentan catarata, y aunque no hay reportes que muestren el 100 % de eficacia en la corrección, si se controlan factores pre-, intray posquirúrgicos, se puede mejorar la exactitud de los resultados.

Este editorial es un preámbulo que muestra que este tema es amplio, llegando a ser extenso. Es importante tener un consenso con acuerdos y recomendaciones a través de los cuales se pueda ayudar a los oftalmólogos latinoamericanos a adoptar mejores prácticas durante la cirugía de catarata en pacientes con astigmatismo y mejorar sus resultados, y estoy hablando del COLASC, Consenso Latinoamericano de Astigmatismo en Cirugía de Catarata, del cual muy pronto publicaremos los resultados.

Bibliografía

1. Ferrer-BlascoT,Montes-MicoR,Peixoto-de-Matos SC, Gonzalez-Meijome JM, Cervino A. Prevalence
of corneal astigmatism before cataract surgery. J Cataract Refract Surg 2009; 35:70-75. 2. Alio JL, Ab- delghany AA, Fernandez-Buenaga R. Enhancements after cataract surgery. Curr Opin Ophthalmol 2015; 26:50-55.

ArtículosCatarataNoticiero Alaccsa-R

Antibiotic prophylaxis covered in webinar

posted by adminalaccsa 10 diciembre, 2017 0 comments

Antibiotic prophylaxis covered in webinar


Experts discussed considerations for antibiotic prophylaxis in cataract surgery by Ellen Stodola EyeWorld Senior Staff Writer

October 2017 issue of EyeWorld. Con permiso de EyeWorld.


Contact information

Chang: dceye@earthlink.net
Mah: Mah.Francis@scrippshealth.org

Shorstein: NShorstein@eyeonsight.org

Stiverson: rk.53stiverson@gmail.com

A recent webinar sponsored by the ASCRS Cataract Clinical Committee examined the topic of antibiotic prophylaxis for cataract surgery. Faculty weighed in on intracameral and topical antibiotics and factors to consider. Speakers included Richard Kent Stiverson, MD, Denver, Colorado, Neal Shorstein, MD, Walnut Creek, California, David F. Chang, MD, Los Altos, California, and Francis Mah, MD, La Jolla, California.

Dr. Mah presented on current trends in infectious endophthalmitis and touched on topical antibiotics, which he noted are the majority of what U.S. ophthalmologists are using. There is no FDA-approved antibiotic currently on the market for prophylaxis in cataract surgery, he said.

Dr. Mah then shared data on topical antibiotics and post-surgical endophthalmitis rates. “In general, we’re not doing too bad in terms of infectious endophthalmitis following cataract surgery,” he said, with the accepted rate of about 1 in 1,000. But what’s causing it? Dr. Mah said there was a landmark prospective study looking at this, which showed that 60% of patients with bacterial endophthalmitis were culture-positive.

Dr. Mah went on to discuss the prognosis for these patients. After endophthalmitis, about 43% of patients have vision of 20/40 or better but 34% have 20/200 or worse af- ter treatment. The prognosis is bad if initial vision is poor, Dr. Mah said.

We know that there are some relatively es- tablished risks for endophthalmitis. Poste- rior capsule rupture, preexisting periocular infections, and immunocompromised status are risk factors. However, Dr. Mah noted that it is multifactorial.

Prophylaxis is one area that physicians can potentially manage, Dr. Mah said, adding that the source of the organism is endog- enous. The lids, lashes, and lacrimal system harbor the organisms that cause the major- ity of endophthalmitis.

There are two approaches that require che- mo prophylaxis. One is the reduction of en- dogenous surface organisms using either antiseptic or topical antibiotic, and the other is eradication of pathogens that gain entry into the ocular tissues using an antibiotic, Dr. Mah said.

As far as eliminating endogenous surface organisms, povidone iodine is effective, he said, adding that physicians should leave povidone iodine in the eye for at least 5 min- utes of contact time. The landmark study showed significant reduction of endophthal- mitis rates with use of povidone iodine, Dr. Mah added. There was a 75–80% reduction in endophthalmitis with povidone iodine.

What do physicians know about topical an- tibiotic prophylaxis? One of the first studies was in 1964, Dr. Mah said. There were 22 infections in 20,000 cataract extractions. A later follow-up study in 36,000 consecutive retrospective operations found that switch- ing antibiotics could help. Dr. Mah said there is in vivo animal data from a study at the University of Pittsburgh that found that us- ing an agent was better than saline, and us-ing it preop and postop was bet

ter than one or the other. There are problems with topical drops, Dr. Mah noted, including com- pliance, manual dexterity, ocu- lar surface toxicity, penetration into the eye, and cost. In terms of educating patients, Dr. Mah said that a study from Canada showed that upward of 92% of patients were incorrectly putting drops in following routine cata- ract surgery.

When using topical antibiotics in the U.S., most physicians begin use about 1–3 days prior to sur- gery, with frequent dosing the day of surgery. Dr. Mah added that mostly there is no post- operative tapering, and antibi- otics are often used at least 7 days postoperatively.

In summary, he said that topical antibiotics are widespread and entrenched in the U.S., post- operative use is greater than preoperative use, retrospective studies suggest efficacy, and surrogate evidence suggests ef- ficacy. However, he noted that efficacy of topical antibiotics is unproven in a placebo-controlled prospective study.

Dr. Shorstein gave a brief histo- ry of intracamerals, referencing several studies. He discussed a study from Sweden published in the Journal of Cataract & Re- fractive Surgery (JCRS) in 2002 and a large randomized control trial by the European Society of Cataract & Refractive Surgeons (ESCRS), which was initiated in 2003 with results published in JCRS in 2007.

Dr. Shorstein discussed his personal experience at Kaiser Per-

manente. In 2007, they noticed a
slight increase in endophthalmitis.
They began to use cefuroxime in
2007 and later between 2009 and
2011 added moxifloxacin and van-
comycin. The 2007 endophthalmi-
tis rate was similar to the baseline
rate of the ESCRS study, he said,
noting that his group saw a 22-fold
decrease in endophthalmitis from
the beginning of the study to the
end. There were about 2,000 eyes
that received an intracameral in-
jection alone with no perioperative
or postoperative drops prescribed.
After this, Dr. Shorstein said a Na-
tional Eye Institute (NEI) grant
prompted further study of larger
groups in the region, which result-
ed in an in-depth look at 315,246
eyes with 250 surgeons. He noted
three take-home messages. Look-
ing at the topical alone group com-
pared to those with an added in-
tracameral injection, there was a
42% reduction in endophthalmitis
in the injection group, which was
statistically significant. Patients
who received no antibiotic (e.g.,
forgetting to fill the prescription)
had nearly a two-fold increase in
the risk of endophthalmitis com-
pared to the topical group. The
question remains whether topical
drops provide any additional ben-
efit when intracameral antibiotic is
injected. Finally, comparing intra-
cameral cefuroxime and moxiflox-
acin in those patients who were
taking topical drops in addition
to the injection, the cefuroxime
group had the highest confidence
in reduction of endophthalmitis,
Dr. Shorstein said. The moxiflox-
acin group had a slightly higher
rate, but the confidence interval
was wider. It would take tens o

thousands of patients and years of study

surgeries and had five cases of endophthal- anti-VEGF treatment, and use early

mitis.” From 2005–2016, reformation of the anterior chamber and stromal hydration of the incision were done with balanced salt solution containing vancomycin, and Dr. Stiverson said there were 55,000 cases without incidence of endophthalmitis.

Dr. Chang discussed the rare but devastat- ing complication of HORV, which he said is one of the worst complications that can happen during cataract surgery because of the potential for bilateral blindness. This was first brought to surgeons’ attention in 2015 with a paper published in Ophthal- mology. The recommendation was made to consider avoiding intracameral vanco- mycin use for routine prophylaxis. “Given the widespread use of vancomycin, many of us were concerned about drawing this conclusion from a series of just six pa- tients,” Dr. Chang said.

ASCRS and the American Society of Retina Specialists (ASRS) formed an HORV Task Force to analyze the prevalence, etiology, treatment, and outcomes of this disease. They set up an online registry, conducted an e-survey of the ASCRS membership, did a literature search, and consulted with immunologists. The paper detailing these results was published in Ophthalmology in May, Dr. Chang said. It reported a series of HORV in 36 eyes of 23 patients (13 bi- lateral and 10 unilateral), all of which re- ceived intraocular vancomycin. It could occur 1–21 days after surgery, he said, adding that if the second eye received vancomycin, the onset of HORV was often faster and more severe.

pan-retinal photocoagulation.

Dr. Chang said that HORV is most like- ly a type III delayed hypersensitivity to vancomycin. Because there is no specific test for type III hypersensi- tivity, it is difficult to prove, but every confirmed case of HORV to date re- ceived intraocular vancomycin follow- ing uncomplicated cataract surgery. In addition, systemic vancomycin causes a similar type III hypersensi- tivity called leukocytoclastic vasculitis with delayed onset and a predilection for venules. A 2014 ASCRS member survey found that 50% of respon- dents were using intracameral antibi- otic, with vancomycin being the most common agent (37% overall and 52% of American respondents).

The HORV Task Force offered several considerations, Dr. Chang said. These include weighing the risk of HORV against the risk of endophthalmitis when using vancomycin, reconsidering vancomycin with close sequential bi- lateral cataract surgery, and knowing that HORV may not cause symptoms in the first eye and a dilated retinal exam may be the only way to detect it. He said that many surgeons have switched to using intracameral cefu- roxime or moxifloxacin in light of the potential for HORV.

View the full presentation of this we- binar at www.ascrs.org/center-for- learning/video/antibiotic-prophylaxis- cataract-surgery.

Dr. Chang offered recommendations for
management. He said to consider avoid-
ing intravitreal vancomycin if HORV is
suspected, consider an ocular and/or
systemic work-up for other syndromes if
there is an unclear diagnosis, use aggres-
sive systemic and topical corticosteroids,
consider intraocular steroids, use early

ArtículosCatarataNoticiero Alaccsa-R

Caso Catarata

posted by adminalaccsa 10 diciembre, 2017 0 comments

Caso Catarata


Coordinador:

Dr. Fernando Soler – España

Panelistas

Dra. Guadalupe Cervantes – México Dr. Gerardo Valvecchia – Argentina


Contacto

Dr. Fernando Soler – fsoler@gmail.com
Dra. Guadalupe Cervantes – gpecervantes@hotmail.com Dr. Gerardo Valvecchia – gerardovalvecchia@hotmail.com


Dra. Guadalupe Cervantes

 

Vamos a presentar un caso-discusión del año 2014 de una cirugía facorrefractiva en la que, secundario al cálculo de una lente intraocular, se produce un error refractivo. Creemos que la situación tiene un alto valor didáctico tan- to para cirujanos de cataratas como refracti- vos. Este caso en la actualidad no sería proble- ma para una gran parte de los segmentólogos avanzados, pero es muy probable que una ma- yoría de oftalmólogos podrían seguir incurrien- do en el mismo error que se produjo.

El paciente es un varón hipermétrope y présbi- ta de 47 años de 1.90 m de altura y largos bra- zos y que acude a consulta para eliminar sus gafas. Los antecedentes no son de interés y en la exploración se le aprecia:

Rx manifiesta y bajo cicloplejia:

• OD:+3.25,-0.50@75o=1.00

• OI:+4.25,-0.50@105o=1.00
A ello se añade un +1.50 de adición présbita.

El resto de la exploración ocular es normal y los datos biométricos por interferometría son:

• ALX:22.18mmOD/21.69mmOI • K:43.77-44.23OD/44.06-44.08OI • ACD:3.24OD/3.18OI
• LT:4.01OD/4.02OI
• WTW:12.4OD/12.3OI

Se realiza una indicación de lensectomia re- fractiva con implante de una lente TECNIS ZK. Se calcula la lente con fórmulas para ojo corto, en este caso Haigis y Hoffer Q, las cuales (redondeando hacia una mínima mio- pía de -0.25) indican sendas lentes de 27.00 DenODyde28.50DenOI.

La elección de la lente TECNIS ZK se hizo porque en ese momento era la única lente hidrofóbica del mercado sin glistenings y que daba una buena visión de cerca (50 cm para el foco de cerca) y aceptable intermedia. A ello se unía la envergadura del paciente que, de por sí, tendía a alejar los objetos.

La intervención del paciente transcurre sin in- cidencias y al mes presenta la siguiente visión:

AVSC: 0.4 OD/0.3 OI y en VC: J1+ AVCC:

• OD:-1.00,-0.37@60o=1.00

• OI:-1.25,-0.62@100o

A los cuatro meses de su procedimiento pri- mario se le realizó un ajuste refractivo con lá- ser excimer y se obtuvo la emetropía buscada.

CUESTIONES

1a Cuestión. En un caso similar ¿su indica- ción sería de cirugía intraocular o de un pro- cedimiento de PresbyLASIK?

Dra. Guadalupe Cervantes: Dada la edad del paciente, y su mala agudeza visual para lejos y presbicia, yo le realizaría una ci- rugía de facoemulsificación, con implante de lente intraocular trifocal, no tórico; realizan- do las incisiones en los ejes más curvos.

Dr. Gerardo Valvecchia:

Habitualmente mi indicación para facorrefractivas es des- pués de los 50 años de edad en hipermétropes y más de 60 en miopes, por lo que hubiera he- cho todo lo posible por no ope- rarlo. Obviamente existen ex- cepciones según la motivación del paciente, y este caso, podría haber sido una de ellas.

En mis manos, y con esta refrac- ción, no indicaría PresbyLASIK debido a que los resultados habitualmente no se sostie- nen en el tiempo, y al desarro- llar síndrome disfuncional del cristalino y eventual catarata los cálculos del LIO no son del todo previsibles.

No tengo experiencia con el Tecnis ZK por que no se co- mercializó nunca en Argentina, pero sin dudarlo, en 2014 hu- biera estado completamen- te de acuerdo con la decisión

tomada y realizaría una lensecto- mía con colocación de LIO de adi- ción +2.75 por la gran longitud de sus brazos.

En la actualidad, hubiera optado por un LIO de rango de visión ex- tendida o un trifocal con distribu- ción de luz para media distancia de más del 20%.

2a Cuestión. En el caso de un paciente relativamente joven al que se le vaya a hacer un recam- bio de cristalino transparente o no ¿prefiere una lente hidrofóbi- ca, hidrofílica o le es indiferente?

Dra. Guadalupe Cervantes:

Es prácticamente indiferente. Si implanto un lente hidrofílico y después de varios años se opaci- fica la cápsula posterior, a pesar de un buen pulido transoperatorio de la misma, le realizó una capsu- lotomía con láser de Yag.

Si implanto un lente hidrofóbico, este puede de- sarrollar “glistenings”, como efecto secundario.

Dr. Gerardo Valvecchia: En mi experiencia, los LIO hidrofóbicos y los hidrofílicos no pre- sentan diferencias significativas en cuanto al resultado visual y al comportamiento a largo plazo. Sin embargo, existen diversos trabajos que indican mayor incidencia de opacidad cap- sular posterior en el caso de los lentes hidrofí- licos. Dato no menor, por la edad del paciente.

Algunos autores ponen mucho énfasis en que el diseño de los LIO es un factor de importan- cia mayor en cuanto a la opacificación capsular más que el material en sí.

A la hora de la elección, se debe considerar los LIO que posean filtro de protección macular y que no desarrollen “glistening”.

Hoy elegiría LIO de acrílico hidrofóbico o hidro- fílico, con filtro y bordes rectos. Realizaría cap- sulorrexis con overlapping 360o de 5 mm.

3a Cuestión. ¿Qué ocurrió para que se produ- jera un error biométrico superior a una dioptría de equivalente esférico miópico?

Dra. Guadalupe Cervantes: Primero men- cionar que me llamó la atención las profundida- des de cámaras anteriores de ambos ojos, que no corresponden a la hipermetropía presente.

Al realizar el cálculo de lente intraocular con la fórmula Universal II de Barrett, el LIO que se debió haber implantado para el ojo derecho era de +25.0 D, con un residual de -0.13 D, en lu- gar del que se implantó de +27.0 D, lo cual ex- plica la sorpresa refractiva miópica. Del mismo modo, el cálculo del LIO para el ojo izquierdo, me da un LIO de +26.5 D con un residual de 0.1 D, y se implantó un LIO de +28.5 D, dán- dome también un resultado miópico no espe- rado en el posoperatorio.

Pienso que hay algún tipo de error en el cál- culo del lente, ya que el resto de los datos son

correctos. Llama la atención que, cuando se introducen esos datos a las fórmulas de 3a generación, dan valores de potencia de len- tes intraoculares, similares a los que se le implantaron al paciente cuando se operó. Aunque el ojo no es excesivamente corto, tal vez fórmulas que contemplen más variables, (por ej.: grosor de cristalino, etc.), hubieran dado más información y por lo tanto, el cál- culo hubiera sido posiblemente más exacto. Esto se corrobora al introducir los datos en fórmulas de 4a y 5o generación, como la de Barret II, que arrojan poderes de lentes para implantar menores que las implantadas, y sin sorpresas refractivas, como las presenta- das en este caso.

Dr. Gerardo Valvecchia: El cálculo del LIO en pacientes hipermétropes altos es, en mu- chos casos, extremadamente difícil de preci- sar por ser un lente de alto poder dióptrico. Con eso, el resultado refractivo queda sujeto a la posición efectiva del lente (ELP). La ELP es uno de los pocos factores que sigue sien- do difícil de calcular aun con las fórmulas de última generación.

A mayor poder dióptrico, mayor posibilidad de errores refractivos posquirúrgicos.

En este caso puntual es un paciente hiper- métrope atípico, que presenta largo axial bajo, con ceratometria de 44,00 D promedio y cámara anterior amplia. Las fórmulas utili- zadas si bien son muy buenas para ojos cor- tos estándar, al no ser este un ojo hipermé- trope típico, no pudieron predecir la ELP en forma correcta.

Hoy en día tenemos algunas herramientas de las cuales nos valemos para tratar de mi- nimizar ese error, pero aun así, aunque es menos frecuente, sigue existiendo la posibi- lidad; por lo que es necesario comunicarlo a los pacientes de manera previa a la cirugía.

La biometría óptica, las constantes optimi- zadas de ULIB más el cálculo con múltiples

fórmulas de última generación permi- ten reducir las sorpresas refractivas. Están a nuestra disposición en forma gratuita la fórmula Panacea de David Flikier, Universal II de Barrett, Ladas Super Formula y HRF Hill, entre otras.

Solo como ejemplo, si lo hubiéramos operado hoy, utilizando la fórmula Panacea del Dr. Flikier o la Universal II de Barrett, el LIO para el OD sería 25.5 D,enlugarde27.00D,yelOI,27.5D en lugar de 28,50 D. El resultado hu- biera sido muy cercano a la emetropía para lejos.

Recomiendo usar, para lentes multifo- cales, cálculos con multifórmulas den- tro del interferómetro, comparar entre ellas y también, tener una estadística personal a la hora de la elección.

Suelo pregonar operar ambos ojos con diferencia de 7 días, de rutina primero el ojo no dominante, y de existir sor- presas, se pueden prever y corregir en el dominante.

4a Cuestión. Ante una sorpresa re- fractiva como ésta, su actitud sería:

• Ajusterefractivoconláserexcimer.

• Recambiodelalente.

• Implante de lente Add-on en sulcus.

Dra. Guadalupe Cervantes: Yo realizaría un ajuste con láser exci- mer, siempre que el grosor corneal me lo permita.

Dr. Gerardo Valvecchia: La res- puesta es con respecto a qué haría hoy si me ocurriera y no lo que hubiera he- cho en 2014. Seguramente en 2014 hubiera corregido con láser.

En la actualidad no indicaría láser excimer. Si bien el defecto residual es miópico y en teoría es la abla- ción que menos afectaría, recorde- mos que el paciente tiene colocado un LIO multifocal y, en mi experien- cia, cuanto menos se modifique la córnea, tanto mejor. No es mi in- tensión generar un nuevo problema a un problema ya existente.

A mayor tiempo de realizada la ci- rugía primaria, más tortuoso será el procedimiento para cambio de LIO. Hasta 4 o 5 meses de operado es en mi práctica una opción válida y no tan traumática para el ojo.

El implante de LIO Add-On sería mi elección, de material hidrofílico en sulcus. Hoy contamos con varios modelos diseñados para ser coloca- dos con facilidad con corrección es- férica y de toricidad que los hacen muy efectivos y predecibles para estas circunstancias.

Eventualmente cuando tenga ma- yor experiencia y resultados a largo

plazo el Femtosegundo RELEX SMILE sería una posibi- lidad más a contemplar por la menor alteración de la superficie ocular y de la histoarquitectura corneal.

Explicación del error refractivo

El error en este caso se produjo al hacer el cálculo con fórmulas de tercera generación que no tienen en cuenta el grosor del cristalino (LT). A posteriori se re- calculó con fórmula Universal de Barrett II y el resul- tado de la lente que se debía haber implantado era de 25.50 D en OD y de 27.00 en OI. En este caso el pa- ciente habría quedado emétrope o dentro de un ran- go de +/- 0.25.

Existe una aproximación teórica que llamamos el “ajuste refractivo de Aramberri” que se presentó en FacoElche y que se encuentra a disposición de todos en la página de facoelche.com

Va dirigida a todos aquellos que no tengan acceso a fórmulas de 4a o 5a generación y manejen las habi- tuales de 3a. Su idea es que la suma de la ACD+LT ha de ser de 7.85 mm. Por encima de ella los ojos se hi- permetropizan (caso típico de los miopes medios y al- tos) y por debajo de 7.80 se miopizan, como es nues- tro caso en el que su sumatorio era de 7.25 en OD y de 7.20 en OI.