ArtículosCórneaNoticiero Alaccsa-R

Artiflex tórico: “Una grave e inesperada complicación”

23 diciembre, 2020 0 comentarios

Artiflex tórico: “Una grave e inesperada complicación”


Coordinadores:

Dr. Luis Zunino – Argentina

info@luiszunino.com

Dra. Eliana Acosta – Argentina

elianaacosta_0422@hotmail.com


Panelistas:

Dr. Adolfo Güemes – Argentina

adolfoguemes@gmail.com

Dr. Ernesto Otero – Colombia

eo@barraquer.com.co

Dr. Ángel Pineda – Venezuela

dr.angelpinedafernandez@gmail.com


Resumen:
Se presenta caso clínico de paciente masculino de 39 años quien acude con diagnóstico de queratocono, el cual queda descartado mediante estudios complementarios con fuerte motivación en dejar de usar gafas. Se propone realizar el implante de una lente intraocular fáquica Artiflex tórica en ambos ojos.

El procedimiento se lleva a cabo paso a paso en forma adecuada, sin dificultades hasta el momento de realizar la iridectomía periférica en la cual surge una complicación inesperada.


Descripción del caso

Paciente masculino de 39 años, sin antecedentes de relevancia, consulta porque refiere no tolerar las LC; con diagnóstico de queratocono sin posibilidad quirúrgica mediante procedimientos fotorefractivos. Se encontraba muy motivado por el hecho de dejar de usar lentes aéreos.

AVSC AO: CD AVCC:
OD: (-6.00) (-4.00 x 110°) 0.9. ACD 3.42 mm. Recuento endotelial 2498 células /mm2. Paquimetría central 540 micras.
OI: (-6.50) (-3.50x 60°) 0.7. ACD 3.48 mm. Recuento endotelial 2510 células /mm2. Paquimetría central 532 micras.

En la topografía se observa un astigmatismo regular, ortogonal, simétrico con valores queratométricos dentro de los parámetros normales, como se puede ver en las (figuras 1-2).

Mediante estudios complementarios se descarta queratocono. Por lo que se le propone al paciente como plan quirúrgico realizar la colocación de una lente fáquica Artiflex tórica para corregir el vicio refractivo. Se comenzó por el OI que es su ojo no dominante. (Figura 3)

Se implanta la lente fáquica Artiflex tórica en el eje adecuado, de acuerdo con el mapa otorgado por la casa Ophtec (Figura 3) y al momento de realizar la iridectomía periférica se constata que la tijera de Vannas se encontraba averiada, a pesar de haberse inspeccionado bajo el microscopio.

La misma había sido utilizada para cortar unas membranas en un paciente que presentaba VPPH (vítreo primario persistente hiperplásico), lo que provocó que el tejido uveal se incarcelara entre las ramas de la tijera generando una diálisis iridiana, ruptura irregular uveal y sangrado profuso en cámara anterior.

La cirugía termina aparentemente sin complicaciones a pesar de la iridectomía la cual no fue tan prolija (Figura 4).
A las 24 horas, el paciente se encontraba con:
AVSC OI: CD
Presión Intraocular (PIO) OI: 30mmhg
Biomicroscopía (BMC) OI: Hipema y gran inflamación.
Se instaura tratamiento antihipertensivo aparte del tratamiento antiinflamatorio y antibiótico previo (Figura 5)

Resolución de caso

Después de iniciado el tratamiento antibiótico, antiinflamatorio y antiglaucomatoso evoluciona con AVSC OI (0.4), respondiendo en forma satisfactoria entre la primera (Figura 6) y segunda semana (Figura 7).

Ante estos resultados el paciente solicita la cirugía del OD, la cual se realiza sin complicaciones logrando una AVSC a las 24 horas posquirúrgico de 1.2 (Figura 8).

Actualmente se realiza seguimiento periódico controlando agudeza visual, topografía y recuento endotelial; los mismos se mantienen estables dentro de parámetros normales. Seis años después de la cirugía sigue manteniendo un recuento endotelial de 2443 células/mm OD 2467 OI células/mm.

Conclusiones

En los últimos años han sido ampliamente descritas en la literatura las complicaciones posoperatorias asociadas al uso de lentes fáquicas intraoculares esféricas y tóricas.

Algunas de estas se rotaban, con las consecuencias que esto trae aparejado en lentes que presentan tallados cilindros. También se observó la aparición de catarata por cambios en la circulación del humor acuoso, o toque de la lente intraocular en la periferia del cristalino, anoxia del tejido uveal que termina provocando atrofia, la pérdida de células endoteliales producto de un erróneo diseño de la lente intraocular, mediciones inexactas del segmento anterior, o frotamiento ocular profuso.

Este caso nos deja como enseñanza el revisar previamente todo el instrumental con el que se va a realizar un procedimiento y nunca “cantar victoria” antes de terminar completamente una cirugía, incluso a pesar de no haberse presentado complicaciones intraquirúrgicas; se debe evaluar al paciente meticulosamente tanto en el pre como en el posoperatorio. De esta forma nos aseguraremos el éxito de la cirugía y la satisfacción del paciente ya que estas lentes han demostrado tener excelente predictibilidad, seguridad y eficacia.

El paso de los años da cuenta de ello, ya que son las que más tiempo llevan de seguimiento en el mercado mundial. Preguntas del caso

Preguntas del caso

Dr. Ernesto Otero: Hoy día hago la iridectomía periférica a través de una incisión nueva vertical hecha a un lado de la incisión principal (temporal o nasal a esta -no importa-) con cuchillete de 1.2 mm a nivel de la raíz del iris (limbo quirúrgico). Introduzco la pinza Serrata de Greishaber (retina) verticalmente, tomo el iris y hago el corte sin traccionar demasiado el iris. Esto ayuda a que la iridectomía sea más pequeña. Igual que hago en DMEK (incluyo unas fotos de DMEK para ilustrar la técnica).

Considero que el sangrado viene generalmente de la raíz del iris. Al “traccionar” demasiado se produce una diálisis que es la causa del sangrado como sucedió en este caso. Es por esto que hago generalmente una incisión nueva vertical. Como la incisión principal generalmente es en 2 pasos (lamelar primero y luego vertical ingresando a la cámara anterior), al hacer la iridectomía a través de ella, se corre el riesgo de tener que “traccionar” más el iris para llegar a la raíz o que quede muy central y grande. Si hay sangrado, es importante taponar con aire o visco-elástico (prefiero aire) dejando una burbuja en la cámara anterior de unos 3-4 mm. Esta tiende a subir haciendo presión y evitando el sangrado profuso. Existirá el hifema, pero no total como en este caso.

También es importante en estos pacientes dilatar la pupila con tropicamida tópica para evitar el bloqueo pupilar en el posoperatorio inmediato y las sinequias pupilares al lente. (Figura 9)

Dr. Ángel Pineda: Siempre realizo iridectomía periférica alrededor de hora 12 en pacientes a quien coloco el LIO Artisan o Artiflex para evitar bloqueo pupilar. La realizo tomando tejido del iris periférico con una pinza colibrí, no tan cercano a la raíz del iris, para evitar sangramiento profuso. Corto por debajo de la colibrí, siempre con la tijera de Vannas en dirección vertical, para que la iridectomía periférica sea de base corta y más bien un poco alargada.

Dr. Adolfo Güemes: La iridectomía no debe estar hecha muy cerca de la raíz del iris donde está el collarete vascular y siempre mirar antes de tomar con la pinza que no haya un vaso.

2. ¿Qué tamaño de iridectomía periférica considera usted como ideal para que mantenga la circulación del humor acuoso y no sea antiestético para el paciente?

Dr. Ernesto Otero: Considero lo importante, más que el tamaño, es que la iridectomía se encuentre permeable. Es esencial incluir la hoja posterior del iris para que pueda haber paso del acuoso. Cuando uno la hace, nota inmediatamente cómo las presiones se igualan y el iris deja de “empujar” hacia la córnea. Lo segundo es la localización para no inducir fenómenos fotópicos en el posoperatorio. Debe ser superior y periférica. Entre 0,5 mm y 1 mm es ideal.

Dr. Ángel Pineda: Lo ideal es hacer una iridectomía periférica de menos de 0.5 mm x 0.5 mm. La figura 10 muestra una iridectomía muy grande (en largo y ancho), y la figura 11 muestra una iridectomía muy bien de ancho, pero muy larga. No son necesarias iridectomías periféricas grandes para mantener una buena circulación del humor acuoso de cámara posterior a cámara anterior.

Dr. Adolfo Güemes: No es necesario que sea mayor a 2-3 mm. Si es necesario en caso de que sea afáquico, que no tenga restos de cápsula o masas por detrás.

3. ¿Cómo maneja el hifema con hipertensión ocular que no responde a hipotensores?

Dr. Ernesto Otero: El hifema se debe manejar idealmente de forma expectante si la presión está controlada. Si no, es mejor hacer un lavado de la cámara anterior y “bloquear” el sangrado con una burbuja de aire. Igualmente se debe hacer énfasis en no retirar los coágulos de la zona de la diálisis ya que el riesgo de re-san- grado es elevado.

Dr. Ángel Pineda: Algo muy importante es controlar la presión intraocular. En casos de no controlarse con hipotensores, se debe considerar el lavado de la cámara anterior en el centro quirúrgico, para retirar el coágulo sanguíneo, y al mismo tiempo, evitar complicaciones mayores como la impregnación hemática de la córnea.

Dr. Adolfo Güemes: Si no responde a gotas hipotensoras y acetazolamida, se debe reintervenir aspirar el coágulo y restos de hemorragia.


REFERENCIAS

  1. Thomas Kohnen, MD, PhD, FEBO, Daniel Kook, MD, Merce Morral, MD, Jose Luis Güell, MD. Phakic intraocular lenses,Part 2: Results and complications. J Cataract Refract Surg 2010; 36:2168–2194. 2010 ASCRS and ESCRS
  2. José L. Güell, Felicidad Manero. Lentes in- traoculares fáquicas tóricas de soporte iri- diano (lentes Artisan/Verisyse); Am J Oph- thalmol, 2006; 141(1): 143-4. 6.

Deja un comentario