Artículo Editorial: Visión Plus Ultra: La Mirada Perfecta
Dr. Jorge E. Valdez García
CIRUGÍA REFRACTIVA: UNA EXPERIENCIATRANSFORMADORA PARA EL PACIENTE
La visión perfecta es un concepto que ha fascinado a la humanidad durante siglos. Lograr que los pacientes tengan una visión perfecta ha sido una aspiración que he tenido en mis 30 años de práctica como oftalmólogo especialista en cirugía refractiva, pero esta aspiración no es solo mía, lo ha sido, lo es y los seguirá siendo de muchos colegas que se dedican al mismo campo de la medicina. Han sido muchos los que han hecho aportaciones valiosas en este campo, particularmente en nuestra región hispanoamericana.
La visión perfecta es un objetivo que muchos cirujanos refractivos buscamos alcanzar. La agudeza visual de 20/20 se considera normal, pero ¿es posible ver más allá de este límite? Aunque es difícil definir qué es exactamente la “visión perfecta”, podemos explorar los límites de la visión humana y las posibilidades de alcanzar una visión óptima. La visión es un proceso complejo que involucra varios componentes del ojo y el cerebro. La visión humana tiene límites naturales, como: Agudeza Visual: La agudeza visual se mide en términos de la capacidad para distinguir detalles finos. La visión de 20/20 se considera normal (término estadístico que se refiere a la mayoría), pero algunas personas pueden tener una visión más aguda, como 20/15 o 20/10. Sensibilidad a la Luz: La sensibilidad a la luz varía de persona a persona. Algunas personas pueden ser más sensibles a la luz que otras. Percepción de Colores: La percepción de colores también varía de persona a persona. Algunas personas pueden tener una mayor capacidad para distinguir entre colores similares.
¿Es Posible Alcanzar una Visión Perfecta? El objetivo de las diferentes técnicas de cirugía refractiva que existen actualmente es recuperar la visión normal. Sin embargo, hay personas que logran ver más. Se ha reportado que hasta un 92% de pacientes que se realizan alguna cirugía refractiva, tienen una visión de 20/20 o mejor. Esto ha llevado a la búsqueda de no solo una “visión normal” sino a lograr la visión perfecta, cambiando el concepto de corregir por el de mejorar la “visión normal” logrando una visión perfecta en cualquier etapa de la vida sobrepasando límites como la presbicia o las opacidades del cristalino. Por lo tanto, es importante destacar que la visión perfecta no solo se trata de la agudeza visual, sino también de la capacidad para ver en diferentes condiciones de iluminación, la percepción de los colores y la capacidad para enfocar objetos a diferentes distancias. Podemos decir entonces que los procedimientos refractivos, tienen que ver con el alto rendimiento: lograr una visión excelente que, a diferencia de los anteojos o las lentes de contacto, es más precisa, siempre está en su lugar y resiste condiciones extremas. Muchas personas en profesiones exigentes (vienen a la mente pilotos y socorristas de emergencia) se han beneficiado de la corrección quirúrgica de la visión. También lo han hecho los atletas, que dependen de su visión para jugar al máximo nivel, y que a menudo tienen que trabajar en entornos difíciles: tierra, arena, viento y lluvia, pasando rápidamente de la luz solar a la luz artificial y lidiando con condiciones físicas, como el esfuerzo y las colisiones, que hacen que las gafas y los lentes de contacto sean difíciles, e incluso peligrosos, de usar.
A pesar de que los cirujanos refractivos podemos corregir completamente las diferentes ametropías, hacerlo no es el enfoque correcto para todos los pacientes. Es en este aspecto que los artistas nos hacen pensar sobre la visión perfecta. La vista informa la vida de las personas más que cualquier otro sentido. ¿Cómo afectan los cambios en la visión a esa realidad? ¿Cómo afectan a la percepción de las personas? ¿Cómo afectan estos cambios a la chispa creativa y al estilo de los artistas? La percepción es, en última instancia, una respuesta individual a los estímulos sensoriales. Sin embargo, varios principios neuro-estéticos universales sustentan la percepción, específicamente en lo que se refiere a la belleza. Estos principios incluyen la simetría, el contraste, el aislamiento, la recursividad (auto-repetición), solo por mencionar algunos, y además estos se perciben transculturalmente.
Decía el poeta y dramaturgo romántico, Christian Friedrich Hebbel, “Los ojos son el punto donde se mezclan alma y cuerpo.” De ahí que, aunque sigamos buscando el “santo grial “de la visión perfecta, sea mejor usar el término de visión ideal. Bajo este concepto debemos considerar, además de la agudeza visual, factores clave como: la sensibilidad a la luz, la percepción de colores y la adaptabilidad. Entonces, podemos definir la visión ideal como una mirada clara, precisa y adaptable que nos permite interactuar con nuestro entorno de manera efectiva
La visión ideal es un concepto que puede variar dependiendo de la perspectiva y las necesidades individuales. Comprender la motivación de un paciente para buscar una corrección de la visión va más allá de las razones generales; Requiere escuchar verdaderamente sus historias individuales. Esto nos remite al aforismo de Sir William Osler:” El buen médico trata la enfermedad; el gran médico trata al paciente que la padece”.
Vemos pues que a medida que se desarrollan más opciones de procedimiento, la cirugía refractiva se convierte cada vez más en un arte. Debemos entonces reconocer el profundo impacto que la cirugía refractiva puede tener en la calidad de vida del paciente. Se trata de mejorar significativamente la calidad de vida y proveer a los pacientes con esa Mirada Perfecta. Ese es el poder transformador de la cirugía refractiva.